13.8 C
Santa Comba
domingo, mayo 5, 2024

Ferrol dice no al cambio de nombre de la plaza de España

Los votos en contra del Partido Popular y Ciudadanos tumbaron la moción del BNG que recibió el apoyo de los concejales de gobierno y de Esther Leira y la abstención del grupo socialista.

Milagros Lara

Con el rechazo al cambio de nombre de la plaza de España propuesto por el BNG se dio carpetazo a la encendida polémica que estos días traspasó los límites de la ciudad. El BNG solo recibía el respaldo de los concejales de gobierno y de Esther Leira, la edila expulsada que escenificaba su separación del ejecutivo sentándose en otra bancada. Frente a ellos los votos en contra del Partido Popular y Ciudadanos y la abstención del PSOE.

La iniciativa de la Fundaçom Artábria defendida por los nacionalistas se presentó por uno de sus miembros Bruno Lopes, quien en su exposición hizo referencias a la guerra civil y a la dictadura para argumentar el cambio de nombre por el de Porta Nova. La misma línea fue la que siguió el  portavoz del BNG, Iván Rivas, que reivindicó el cambio de nombre de la plaza de España como “un acto de reparación da nosa memoria” por ser “violencia simbólica” y nombrarla como plaza de España durante la dictadura.

“Odian a España”

Ana Rodríguez Masafret definió la propuesta como “una provocación” y la calificó como “sectaria”, manifestando que los nacionalistas proponen el cambio porque “odian a España”. Afirmó también que el nombre hace referencia al de este país y que “no tiene el nombre de Franco ni de ningún militar franquista”.

“Tómese la pastilla”

El discurso de la portavoz de Ciudadanos alteró tanto a Iván Rivas que al señalar Masafret que los nacionalistas viven una realidad paralela usando la metáfora de Matrix, la portavoz recibió un desabrido “tómese la pastilla” por parte de Rivas, teniendo que mediar el alcalde Jorge Suárez.

“Non incumpre a lei de Memoria Histórica”

La abstención del PSOE se expuso por su portavoz Beatriz Sestayo, quien subrayó que la propuesta carecía de argumentos ya que no hay una petición ciudadana “masiva” ni se incumple la Ley de Memoria Histórica. Justificó su postura en que “España se chamou igual tanto na ditadura, como na monarquía como na república” y recordó también que fue durante el gobierno socialista de Xaime Quintanilla cuando se cambió el nombre a más de sesenta calles.

“Argumento injustificado”

Martina Aneiros, portavoz del PP, cree que se trata de “sectarismo” basado en un “argumento injustificado”. Argumentó que tanto Recimil como el palacio municipal se construyeron durante un gobierno “ilegítimo” pero que eso no justificaría su derribo. Coincidió con Beatriz Sestayo en señalar que no hay demanda vecinal sobre este asunto, la demanda “solo la tiene ustedes” y no dejó pasar la ocasión de recordar a la corporación que fue con el nacionalista Xaime Bello como alcalde cuando se inició la reforma de la plaza de España “y dejaron la ciudad con muchas deudas”.

“Un informe”

Finalmente, Álvaro Montes, portavoz del gobierno, apoyó la propuesta de los nacionalistas, aunque consideró necesario elaborar previamente “un informe sobre toponimia da técnica de normalización” como todos los cambios de calles

Pódeche interesar

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí
Captcha verification failed!
La puntuación de usuario de captcha falló. ¡por favor contáctenos!
spot_img
spot_img

Síguenos

7,820FansMe gusta
1,661SeguidoresSeguir
1,826SeguidoresSeguir
1,240SuscriptoresSuscribirte

Últimos artigos