Pretender tener éxito invirtiendo en Forex sin haber recibido una mínima formación es, como poco, imprudente. Aunque para ser más exactos en la definición, podría decirse que es la manera más rápida de perder todo tu dinero.
Forex puede ser una gran forma de obtener importantes beneficios, pero desde luego, no se trata de una manera fácil. Exige recorrer un camino que incluye conocimientos, estrategia y autocontrol.
Si eres un recién llegado a este mundo, no está de más volver a recordar cuáles son los puntos más importantes en los que te debes centrar para llegar a operar con éxito. Pasar por alto cualquiera de ellos puede tener un alto coste económico para tí, de forma que graba a fuego en tu mente estos consejos y mantenlos presentes en todo momento.
Dedica tiempo a formarte
La falta de conocimientos es directamente proporcional a tu probabilidad de fracaso. Si crees que no necesitas aprender para invertir y te lanzas a ello sin haber dedicado el tiempo necesario para conocer el terreno que pisas, tus días como inversor están contados. Antes de que vayas a darte cuenta lo más probable es que hayas dilapidado todo tu capital.
No se trata de que para invertir haya que ser un experto en economía, pero se necesita una base de conocimientos mínima para tener ciertas garantías de éxito. Tendrás que familiarizarte con conceptos que te resultarán nuevos como Capital básico (la cantidad total con la que comienzas a operar menos los fondos que tengas en posiciones abiertas) y con la jerga técnica para entender cómo funciona Forex.
Necesitas una estrategia
A la hora de operar se necesita una estrategia contrastada previamente. Invertir no es cuestión de inspiración ni puedes esperar grandes resultados a base de seguir un comportamiento errático. Hay muchos tipos de estrategias diferentes y no necesariamente unas son mejores que otras.
Simplemente necesitas tener la tuya, confiar en ella y sentirte cómodo usándola. Experimentar a través de una cuenta demo como la que ofrece la plataforma Metatrader es la mejor forma de encontrar tu forma de operar sin asumir pérdidas económicas en el proceso.
Cabeza fría
El peor pecado de un trader es ser demasiado emocional. Las operaciones deberían realizarse siempre basándose en datos e informaciones y dejando de lado sentimientos como la euforia o el miedo, ya que son éstos lo que casi siempre propician decisiones equivocadas.
A través del conocimiento y la experiencia será posible tomar decisiones de forma cada vez más desapasionada, pero llegar a ese punto requiere asumir pérdidas y no todo el mundo es capaz de soportarlo.
Administra correctamente tu capital
Invertir en Forex supone que vas a tener que decidir qué parte de tu capital vas a emplear para operar. Como es evidente, no es una buena idea poner todos los huevos en la misma cesta, con lo que además del dinero que decidas invertir en Forex, deberías reservar otros fondos para inversiones más estables o simplemente apartar ciertas cantidades como reserva de seguridad que te sirva para cubrir posibles imprevistos.
Aprende a gestionar el riesgo
Cada vez que ejecutas una operación pones en riesgo tu dinero. Si tienes éxito en las primeras puedes caer en la tentación de asumir riesgos más elevados para incrementar tus ganancia, pero sería un error. En Forex no siempre se gana, por eso hay que asegurarse de que cuando llegan las pérdidas, éstas sean asumibles. El mejor consejo en este sentido es que nunca pongas en riesgo más del 3% de tu capital. De este modo, incluso ante una serie de operaciones desafortunadas, estarás en disposición de seguir invirtiendo sin la presión de ver como tu capital se reduce drásticamente.
