//Manuel Sambade//
La sesión plenaria, que abordó cuestiones como la violencia de género, las reducción de plazas de comedor escolar o cubrir la plaza de Policía Local vacante tras jubilarse el anterior titular, tuvo por punto central el contrato temporal de un conserje para el centro escolar Praia de Quenxe que motivó la denuncia del BNG al alcalde afirmando que “ti eres consciente de que esto pode suponer un fraude de lei e pedímosche que te ateñas á legalidade”.
El detonante fue una moción de urgencia del BNG y aprobada por unanimidad de toda la oposición conformada por BNG, Sempre Corcubión y PP, justificada en base a “que non volva a ocurrir o que está ocurrindo, por desgracia, tan a miudo, e se deixe de facer así e máis cando existe un informe da propia Secretaria de que pode incurrir en fraude na contratación”, señalaron en relación a la intención del gobierno local de cubrir la plaza de conserje del colegio Praia de Quenxe de forma temporal en vez de recurrir a una empresa, postura que el alcalde consideraba más cara y de menor utilidad práctica.
La formación nacionalista mostró su sorpresa “porque despois de 16 anos se poidan seguir facendo as cousas así” en vez de finalizar la RPT “que, según información que temos está prácticamente terminada”. No obstante, según denunciaron, el actúal gobierno habría decidido convocar un plaza sin las garantías legales “e tirar para diante” cuando la propia Secretaria, recalcaron, “lle está diciendo que isto non se pode facer así”.
Guerras absurdas
Lalo Insua, regidor socialista de Corcubión, inició su réplica diciendo a los ediles nacionalistas que no quería entrar en “guerras absurdas” y les pidió “prudencia” al ahora de hacer oposición y que se abstuviesen de decir que “nós poñemos xente pola porta de atrás”. Rebatió pues Insua dichas acusaciones negando la mayor y recordando al BNG que ellos sí habían contratado a una persona en fraude de ley “e sin titulación, que era o electricista”.
BNG, más de los mismo
“O 90% dos traballadores entrou da vosa man”, recalcó Insua, quien defendió su postura reiterando que, cuando el BNG ejerció funciones de gobierno en la localidad, las formas que ahora le afean a él eran moneda de cambio habitual en dicha administración nacionalista. “Por esa regla de tres (reprochó el regidor socialista a los ediles del Bloque) no só en Corcubión, senón no resto de Concellos, estarían en situación irregular” pues, subrayó, “nunca se convocou un oferta pública de emprego en Corcubión”.
Contratos a dedo
Insua criticó la intención de dañar el buen nombre de su gobierno y de su persona al desear transmitir a la ciudadanía que el actual gobierno estaba funcionando a cabo contratos irregulares y favorecedoras de personas afines al partido socialista. “Aquí non hai nin laborales fijos nin funcionarios. Aquí, a día de hoxe, a única funcionaria que hai é a Secretaria-Interventora, que é habilitada nacional.
Según el alcalde de Corcubión los servidores públicos que hoy trabajan para el ayuntamiento que preside son ou indefinidos ou que entraron con contratos daquela (de la época del BNG), que son os que dín eles que están en fraude de lei, e ahí están ate que se termine a RPT e si nos deixa o Señor Montoro”.
Irregularidad laboral, la regla y no la excepción
Lema echó un capote sobre la situación de la vinculación laboral de los trabajadores del ayuntamiento al indicar que lo acontecido en la localidad, lejos de ser algo excepcional, es norma común “porque deberían de mirar noutros Concellos, que case ningún ten regularizados a todos os traballadores”.
“Estamos como a maioría das administración locales e non por eso se pode decir que teñamos contratos en fraude de lei ou que sexa culpa do alcalde de Corcubión”.
