El Catastro de Ensenada de 1753 nos informa de la presencia de navegantes, comerciantes y también pescadores en la villa de Cee. Conocemos la situación social de la villa en la época anterior a la destrucción del antiguo templo de la virxe da Xunqueira, convertida ahora en un santuario del siglo XXI.
Interrogatorio de la feligresía de Cee
En el interrogatorio de la feligresía de Cee de 1753 tenemos la lista de oficios de los vecinos y algunos datos de gran interés, por ejemplo la importancia de las actividades relativas al comercio marino y los oficios de la pesca.
Así se informa que «en el puerto de destta villa se alla armado un cerco o traíña que sirve para la pesca de la sardina que tiene prinzipio por ultimos de Agosto y feneze por prinzipios de Diziembre de ttodos los años». 16 marineros participan en el cerco, la mayoría con un quiñón en él. 25 personas al menos tenían algún quiñón en el cerco. Y se le regulan 3.400 maravedí año. Juan Antonio Perez de Canosa tenía quiñón y medio. Domingo López y Rosendo de Meréns tenían dos. Por la pesca de otras especies cuatro meses al año se considera una renta de 102 maravedís por marinero.
Galeón Nuestra Señora de Pastoriza
Hay en Cee un galeón de nombre Nuestra Señora de Pastoriza que pertenece a Fernando Cerdeiras y otros consortes, regulándose 400 reales por el galeón dedicado a sardina y 360 r por su jornal.
Además tenía otra parte en otro barco pequeño o lancha de nombre San Antonio y ánimas, que regula 300 r. Ambrosio de Campo y María González son las otras partes de la lancha. Había otro barco del mismo nombre San Antonio y Ánimas propiedad de Domingo Rodríguez y otros consortes. Sus ingresos eran de 29.240 maravedís, con el jornal y dos quiñones.
Un tercer barco del mismo nombre era de don Francisco Xavier Domínguez y otros. Era más grande que los anteriores y navegaba «a barias partes conduciendo sardina y otros fletes», con un útil de 34.000 maravedís. Tenía un quiñón en la traíña y un sueldo por 120 días de trabajo, con un útil anual de 49.640 r. Había otro barco de nombre Santa Bárbara, de Francisco González y otros. Y el San Joseph y Ánimas de Ignacio Freire de Andrade. Los dos tenían quiñones de sardina.
Había tres lanchas, de Pedro Fernández, Roque de Otero y Andrés Díaz Porrúa. Una utilidad cada una de 6.800 maravedís. También tenían un quiñón en el cerco. Así pues eran seis barcos pequeños o lanchas de pesca y el barco de fletes.
OFICIOS
En Cee hay buen número de oficios de leyes y letras. Hay escribanos reales como Bartolomé López Vaamonde, Fernando Antonio de Torres, Manuel de Añón, Francisco Recamán. Alberto Ramón González, escribano real y de número de la villa. Los Notarios son Andrés de Otero y Marcos Collazo.
Juan Basanta, sargento mayor del puerto. Don Domingo Díaz Porrúa, hidalgo. Pablo Perez, carpintero, 3 reales jornal. Rafael Bernárdez, cantero, 3 r jornal. Herreros a 3 r jornal son: Francisco de Ponte, Pedro Fernández, Vicente López y Francisco Lovelos. Domingo Romero, encargado de la cárcel, 1.300 maravedís año. Los sastres a 64 m jornal, las palilleiras 2040 m al año, pero Juana Perez superaba los 2.700 m. Barbara da Ponte, panadera, 3.400 m. José Fernandez buiturón, pintor. Domingo Díaz Porrúa, Pedro de Grille y Francisco Fernández, tratantes de vino. Domingo Antonio Agulleiro de Buxantes que da carne por menor en la villa como tablajero. Los tratantes de ovejas son importantes en el rural que rodea a Cee pero también en la villa. Son importantes propietarios de ganado el párroco de Cee don Antonio Mourelle, don Mauro Francisco Perez Porrúa (apoderado de los bienes del «arcediano de Tarastámara»). Antonio de Sar vecino de Buiturón cuenta con media docena de establos para su ganado y reses en arriendo en toda la comarca. En las parroquias de Cee, Brens, Codesos, Lires, Toba, Pereiriña hay 404 cabezas de ganado porcino, 3.391 lanar, 1.433 vacuno, 184 caballar.
En los libros personales de las comprobaciones del Catastro de Ensenada (1761-63) tenemos el número de vecinos de este entorno. En Cee hay 185 vecinos (tres eclesiásticos, cuatro solteras), Refoxos 15, Pereiriña 101, Codesos 30, Brens 64, Lires 83, Toba 72.
Las actividades relacionadas con la pesca son pues relevantes en la villa. También las vinculadas con el cuero como zapateros y curtidores, de tradición en la villa. Zapateros y curtidores están bien remunerados, con casos en que tienen los dos oficios.
Antonio García trabaja medio año como zapatero y es además curtidor ganando al año 25.000 maravedís. Similar sueldo tienen Bernardo Alvores, Ignacio Canosa, Domingo Fernández, Julián López Recamán y Santiago Pazos. Jacobo Fernández es zapatero, curtidor y también comercia con rosarios y «ottras menudenzias», por lo que se le regulan 41.000 m. 12 tratantes de encaje, 4 palilleiras, 4 tejedores, 10 sastres suponen un importante grupo socioeconómico del sector textil. Por ello en Cee hay más cultivo de lino que en las aldeas de su alrededor, que cuentan con un sistema de roturación bianual con preponderancia del maíz.
En Cee el sistema de rotación es cuatrienal en tierras de primera calidad, que se dedican al lino el cuarto año.
Destacan pues las actividades del ramo textil, como los encajes realizados por mujeres que también se ocupan como tejedoras al igual que algunos hombres. En la mayoría de los casos no se citan.
Ejercen en la villa los siguientes artesanos: 17 zapateros y curtidores, 12 tratantes de encaje, 4 palilleiras, 4 tejedores, 10 sastres, 4 herreros y cerrajeros, 3 dueños de hornos, 3 tratantes de vino, 2 carpinteros, 2 maestros de niños, 2 notarios, 5 escribanos, 14 jornaleros.
Devoción a la Virxe da Xunqueira
Este mes de mayo Cee renovó su devoción a la patrona. De nuevo el mar y dos familias de mercaderes están detrás de la historia del templo. Según la leyenda un barco extranjero buscó refugio en la ría que baña el pueblo de Cee en medio de una gran tormenta.
El barco quería volver al mar una vez amainada la tempestad pero los marineros notaron que algo no lo permitía, creyeron que era debido a una figura de madera de una virgen que los atraía a esta tierra, entendieron que la virgen quería quedarse y unos pescadores encontraron en el medio de unos juncos a la virgen con el niño, por este motivo decidieron construir un templo en este lugar.
Por eso la virgen toma el nombre de Xunqueira y también se la conoce como «La Aparecida». Los orígenes del templo actual se sitúan en el siglo XIV, era de estilo gótico, de esta época se ha conservado la capilla mayor, el resto fue destruido en el siglo XIX, en la guerra de independencia en 1809. La iglesia fue reconstruida en el siglo XIX. La imagen de la virgen fue donada por el matrimonio formado por Pedro Antonio Díez Porrúa e Inocencia González de Lema.
Foto iglesia- Web concello de Cee / Foto Virgen Parroquia de Cee