// El Capitán pontevedrés Ramón Navia fue uno de los asesinados// Francisco Carrillo vivió durante años en Foz.
Explotaba un coche-bomba con cincuenta kilos de amonal y tornillería en la Plaza de la Cruz Verde en Madrid. Un Opel Kadett mal estacionado que estalló, provocando un fuerte estruendo.La guadaña de la muerte en forma de atentado terrorista se llevaba la vida de cinco personas y encogía el corazón de todo un país.
Ramón Carlos Navia
Iban en un vehículo militar, que aquel 6 de febrero, a las 8,30 de la mañana, se encontraba a unos trescientos metros de la Capitanía General.
En el atentado de ETA fallecieron los capitanes del Ejército, Ramón Carlos Navia Refojo, Emilio Domingo Tejedor Fuentes, Juan Antonio Núñez Sánchez, el funcionario Antonio Ricote Castillo y el soldado Francisco Carrillo García.
El Capitán de Artillería Ramón Carlos Navia Refojo tenía 46 años y era natural de Pontevedra. También tenía relación con Galicia el soldado Francisco Carrillo García, de 22 años de edad, que era el conductor de la furgoneta militar. Había pasado varios años de su vida en la localidad lucense de Foz. Estaba haciendo el servicio militar en la Compañía de Autos de la Unidad del Cuartel General Regional del Campamento Quintana Lacaci.
El primero (que en ese momento tenía dos hijas de 19 y 14 años) fue enterrado en Carabanchel y Carrillo enel cementerio de la Almudena.
Francisco Carrillo
Según la sentencia los etarras Zabala Erasun y Rodríguez Cordero se encargaron de articular el “coche de la muerte”, mientras quye Ignacio Echevarría Martín “Mortadelo” y “otros dos terroristas no identificados” fueron los autores directos del atentado.
Recientemente la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) incluyó a Echevarría entre los asesinos que fueron beneficiados por un acercamiento “sin haber colaborado con la Justicia”.