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sábado, septiembre 28, 2024

Gema López Quintanal:”Desde la ventana le di el último adiós a mi marido.Los sin nombre lo asesinaron”

– Xosé Manuel Lema- 

Gema López Quintanal tenía 23 años y estaba embarazada de cuatro meses cuando unos asesinos se cruzaron en el camino de su marido. Falleció colaborando con la salida de una prueba ciclista en Salvatierra. José Luis Vázquez Platas, fue acribillado junto a otros dos compañeros. Esa historia ya la hemos recordado aquí. Un 4 de octubre de 1980.

Desde entonces Gema, ni logró dormir una noche entera, ni consiguió encontrar un apelativo para aquellos terroristas.”Para mí son los sin nombre”.

Entrevista a Gema López en Radio Xallas

“Tranquila niña, no pasa nada”

Recuerda el ambiente hostil que se vivía en los “años de plomo” en Vitoria:”Nunca pude colgar una prenda de ropa de él fuera. Había mucho miedo”. Los paseos con su pareja eran cortos.

Había temor pero al guardia civil de Coirós calmaba a su esposa:”José Luis siempre le quitaba hierro al asunto. Tranquila niña, no pasa nada”. Le decía. Era cuestión de un par de semanas. Había solicitado el traslado a Galicia.

Aquel 4 de octubre maldito, Vázquez Platas no tenía que trabajar. “Fue al cuartel a lavar el coche y a tomar una cerveza con sus compañeros”. Y le pidieron un servicio. Fue la última vez. Abandonó su domicilio de la calle Domingo Beltrán. “Desde la ventana le di el último adiós”.

“Presentí que algo raro estaba ocurriendo. Yo quería ir a buscar a José Luis”

Algo raro pasaba por la mente de Gema. “Presentí que algo raro estaba ocurriendo. Yo quería ir a buscar a José Luis”.  No tardaron en llegar las malas noticias en forma de gestos de derrota en los rostros de compañeros suyos. Gema confirmó sus presagios.”¿Platas, sufrió? Preguntó la joven. Le dijeron que no. “Y mí boca se cerró”.

Y llegaron “días negros como el azabache. Tuvo que salir adelante. Cuarenta años después confiesa que “no me sentí apoyada. Hubo un primer boom pero por obligación”.  Afrontó una dura travesía con apoyo de su familia y de compañeros de su marido.

Desde aquel día “la televisión no existe para mí, no quiero ver nada” comenta esta mujer ovetense, dedica en cuerpo y alma a sus dos nietas. No oculta su malestar con el gobierno de Pedro Sánchez y con la relevancia que tiene Bildu.

Años después tuvo que aguantar el tipo y acudir al juicio, con toda la presión ambiental del entorno de ETA. Lo hizo en homenaje al marido asesinado. También tropezó con piedras políticas en Galicia pero al final Vázquez Platas tiene su monolito en Coirós.

De aquellos tiempos recuerda un goteo incesante de personas asesinadas. Como una lotería de muerte:”No eran crímenes. Eran números, La sociedad se adaptó”.

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