– Rafael Lema-
Un museo de Figueira da Foz en Portugal guarda una estela tartésica del Bronce final con el nombre del primer celta nerio conocido, Tasio, el primer antepasado de la tribu asentada en Nemancos en torno al siglo II a. C.
Los nerios llegaron al Finisterre desde las orillas del Guadiana, y en aquel entorno fue hallada la estela en donde invoca a los dioses lugoves del pueblo nerio (gens Neria) el noble Tasiioono, héroe nerio de Kaaltee-Kaltia (Calaecia, Galicia). Es también la primera vez que aparece la mención del territorio geográfico de Calaecia (Galicia). Según la tesis del profesor de la Universidad de Gales, John T. Koch, podemos interpretar el texto de la lauda: «invocando las deidades Lugh del pueblo Neri, para el noble se hace la tumba; permanece inmóvil por dentro; invocando a todos los héroes, la tumba de Tasiioonos lo ha recibido».
LA TRANSCRIPCION
La estela se puede transcribir como:
-lokoboniirabotoar'aikaltelokonanenar'[-]e[n?]akis'iinkoloboiiterobarebetasiioonii.
-lokoobooniirabootooaŕaiaikaalteelokonanenaŕ[.]ekaa?iiśiinkoolobooiiteerobaareb eeteasiioonii; lectio de Untermann (1997), 'Fonte Velha 6 (Bensafrim) (J.53.1) '.
-lokooboo niiraboo too aŕaiai kaaltee lokoo|n ane na_kee kaakii_iin|koolobo|o ii te'-e.robaar|e(be)e tea|śiioonii ('invoking the Lugoues** of the Neri people, for a nobleman [a.i. aire4 ] of the kaaltee [ ] he rests still within; invoking every hero, the grave of Taśiioonos has received him', lectio interpretatio de 339-351 I.S.S.N.: 1578-5386.
Según Koch el dios Lokooboo corresponde al irlandés Lugh, rey de los Tuatha Dé Danann, a veces se invoca en grupo (escrito Lucubo en Galicia y Lugouibus en Celtiberia, Lokooboo tartésico).
La raíz es la misma que luigh 'acostarse', antiguo irlandés laigid, con varios ejemplos más en las inscripciones tartesias: lakaatii 'yace', lakeentii y lakiintii 'yacen'. El galés ner «señor, héroe» muestra que el nombre es celta. Para araiui, tenemos la voz aire «señor, noble». Kalite aparece en las antiguas inscripciones celtas del norte de Italia, lo que significa aparentemente «construido un monumento funerario». Asimismo, lokan, galo cisalpino, significa «tumba»; gach «todos», cách «todos»; para is´iinkooloboo ver Galo Exkingolatos «Hombre heroico».
El verbo compuesto te'-e.ro-baare «[esta tumba] lo ha recibido» es una fórmula recurrente; corresponde a beir «llevar» y el compuesto tabhair «dar», antiguo irlandés d-a.beir, antes t-e.beir «da». El preverbio ro es una de las características celtas más llamativas del tartésico, y funciona igual que el antiguo ro irlandés como parte de los verbos perfectos del pasado, por lo que «ha recibido». Con teasiioonii compare el nombre del rey británico prerromano Tasciovanos, cuyo primer elemento corresponde al nombre del hombre común Tadhg.
Según el historiador gallego Andrés Pena Graña «é um belo texto cinzelado sobre o carnarion, pétrea estela de arenisca, chamada inda hoje carneiro em galegoportugês, que coroou um desaparecido laco, (túmulo), em Fonte Velha-dando conta, segundo a lectio de J. T. Coch e invocando aos Lugoves da Gente Neria do Fisterra Atlântico!, dum nobre do Bronze Final chamado TaÅ›iioono, herói Nerio, da Galiza ou Celtia, psvlm., Galtia/ Kaltia , que em um dia jazeu baixo ele, acabando seu périplo no sul, na Laccobriga conia». En esa misma área de influencia tartésica del sudeste ibérico, donde estaba asentado el pueblo cónico, conocemos otros nombres. Algunos posibles antropónimos serían: aarkuuior, aipuuris, akoolion, arpuuiel, koopeelipoon, lokoopooniir, ooÅ•oir, pootiiea, Å›utuuiirea, taalainon, tiirtoos, uarpooiir o uursaar.
ESTELAS
La mayoría de las estelas sudlusitanas estarían hincadas en tierra, de esta manera la parte inferior de la estela suele ser dejada sin inscripción, al estar enterrada. La estela J.10.1 (Mealha Nova, Ourique, Portugal) muestra dos nombres (botiea y quizá nakertoro): «botiea nakertoro ba te bare ba nar'kenti». La estela J.22.1 (Cerro dos Enforcados, Ourique, Portugal) es otra estela típica, de nuevo con dos nombres personales: «uarboiir saruneea bare nar'kenii».
La tercera estela J.1.1 (Fonte Velha, Bensafrim, Portugal) es la que nosotros comentamos, y para los investigadores resulta extraordinaria por su extensión. Es una piedra arenisca que mide 1,34 x 0,65 x 0,15 metros. Descubierta en la «Fonte Velha de Bensafrim», por los ilustres arqueólogos Estácio da Veiga y Santos Rocha, en 1882, en Lagos, Algarve (Portugal). Se encuentra en el Museu Municipal de Figueira da Foz, publicada por J. Leite de Vasconcellos, arqueólogo Portugués ( III, 7. 1893.) Su escritura está grabada a cincel entre líneas rectas, formando un rectángulo desarrollándose de derecha a izquierda siete veces, como en espiral rectilíneo. Su texto está todo seguido y compuesto de 75 caracteres.
LOS NERIOS LLEGADOS DEL SUR
Apiano habla de los celtas llegados a la Península Ibérica, llamados celtíberos. Estrabón dice que de la migración celta procedían los celtíberos y los berones. De estos celtíberos -nos informa Plinio- se desgajó un grupo que dio origen a los Celtici de la Bética. De ellos partió un contingente guerrero en dirección a Galicia. Esta nueva migración de célticos aliados de los vecinos túrdulos está documentada por Estrabón, que dice que eran parientes de los célticos del Anas (Guadiana), y que una vez atravesado el río Limia se establecieron en la zona del cabo Nerio, también llamado Céltico o Artabro (Finisterre).
Hacia mediados del siglo II a. C., tendría lugar este peregrinatio con motivo de las guerras celtibéricas y lusitanas. Plinio y Pomponio Mela dan los nombres de tres de sus tribus relacionados con el río Tamara (Tambre) y con el cabo Nerio; Celtici Supertamarci, Celtici Praestamarci y Celtici Neri. Los nerios de Nemancos y Céltigos, entre el Xallas y el río do Porto, linde con la Subnaria-Soneira (sobre los nerios). Ptolomeo, los tamaricos en las dos orillas del Tambre, que en sus laudas conocidas dejaron escrito que eran «celtici supertamarici».
Los geógrafos antiguos al mencionar los pueblos o tribus de Callaecia destacan a algunos frente a los restantes subrayando que se trata de célticos, lo que implica que otros no lo son. «En concreto son considerados explícitamente célticos los nerios, ártabros, supertamaricos y praestamaricos (…)» (Las lenguas del Noroeste peninsular y la relación entre astures y galaicos», Javier de Hoz, Universidad Complutense, Larouco, revista anual da Antigüidade Galaica)