//Rafael Lema//
En el siglo XIX Corcubión era uno de los grandes puertos de cabotaje gallegos y del Cantábrico. Armadores y capitanes de esta matrícula llevaban toda clase de géneros a puertos del Atlántico y del Mediterráneo. Desde Inglaterra a Venecia; sin evitar el viaje redondo al Caribe. Pero también Fisterra, Camariñas o Cee contaban con armadores y mercantes matriculados.
Noventa barcos en Corcubión
Un sector prácticamente desparecido ahora en la Costa da Morte y que siguió siendo representativo en el siglo xx. La hegemonía de Corcubión en las Rías Altas se consolida a partir de 1840. Entre 1800 y 1872 tenemos datos de 86 mercantes matriculados en este puerto, a los que añadimos otros cuatro de unos años antes de 1800, con un total de 90 barcos. En Fisterra hay datos de 19 en el período, 12 en Camariñas y 11 en Cee.
Ya tengo analizado el tráfico marítimo de la comarca en la Edad Media y Moderna, o los datos del Catastro de Ensenada de 1752. La investigación en los protocolos notariales de Corcubión, Noia y Muros aportada por Santiago Llovo y papeles privados añaden nuevas fuentes para el ciclo posterior.
En el siglo XIX sobresale entre los barcos usados el bergantín, también el bergantín goleta y la goleta. El queche en la primera mitad del siglo. Entre los veleros que entraban en nuestras rías destacan los portugueses de Setúbal, los vascos de Bilbao-Plencia, los levantinos, catalanes (Barcelona), asturianos (Gijón). Hay citas a 15 barcos ingleses, 10 holandeses y 14 suecos.
Comercio de sal y sardina
Pero los portugueses alcanzan 99. Como solo son citas a capitanes que dejaron algún tipo de rastro documental en notarías y escribanos solo componen una parte del total pero acreditan la proporcionalidad de los puertos de origen. Por ejemplo si de Corcubión son 90 barcos, 74 son de Bilbao, 67 de Vilagarcía, 60 de Muros y 55 de Ribeira, los puertos principales en el comercio marítimo contemporáneo de nuestras aguas.
Era habitual que llevarán sus sentinas varios tipos de mercancías e incluso pasaje. Destaca el comercio de la sal, y la sardina entre 1800-1840 por el trasiego de los fomentadores catalanes. Nuestros palos llevaban sardina prensada al Mediterráneo y volvían con vino y aguardiente de Cataluña; o sal de Torrevieja, Ibiza y Cádiz. Del norte llegaban cereales (trigo, maíz, harina, cebada) e hierro. Aceite y carbón de Andalucía, arroz de Valencia; y carbón de Gijón e Inglaterra. De este país venía carga general. El comercio de ultramar tenía sobre todo en Cádiz un puerto intermediario.
De América llegaba azúcar, cacao, cueros, algodón y palo de tinte. Ya había envíos de encaje, pero la exportación de madera o minerales serían más bien cargas del siglo XX. En cuanto a las procedencias de los barcos, deslumbra Cádiz con 196 registros y Torrevieja con 102. Muy lejos con la veintena entran Santander, Sevilla, Liverpool o Vigo.
Los patrones mercantes de Corcubión
Otro aspecto en el que destacaba Corcubión es por ser el lar de numerosos «mestres», patrones mercantes; con varias sagas y velas conocidas en toda Europa. 57 capitanes son originarios de Corcubión en el período. Solo superado por Ribeira con 77 y Muros con 85, a nivel gallego.
A estos añadimos los 18 de Cee, 16 de Camariñas y 13 de Fisterra. Muchos nombres llegaron al siglo siguiente y a la memoria oral. Sobre todo porque estas sagas de lobos de mar siguieron en activo con hijos y nietos, largos apellidos cosidos por líneas de plata y sal a la piel del gran mar que tanto hermana. Al final de esta etapa heroica, desde 1880, llega otra generación, que prepara los nuevos avances y la modernización del mundo naval hacia el siglo XX. En ese año de 1880 en Corcubión trabajaban los navieros Francisco del Río Osorio y Francisco Porrúa Rodríguez.
En Muxía eran armadores Ignacio Gómez María y Pedro González García. En Camariñas, Ramón Patiño Antelo, cuyo hermano era vicecónsul de Gran Bretaña. Jose María Vázquez era vicencónsul de Francia; y mi pariente Domingo Antonio de Pazos, comerciante en Cádiz, ejercía de vicecónsul de Portugal. Era tío de mi bisabuela Elisa Suárez Pazos, por lo que dispongo de varios documentos familiares del mismo, con sus relaciones con los Domenech, Agramunt, Patiño, Rivas, Borrell. En Fisterra era naviera la viuda de Rodríguez. Agustín y José Rodríguez mandaron como amadores y pilotos el ilustre bergantín goleta Joven Rosita, matrícula de Fisterra.
Grandes marinos de Corcubión
Ahora vamos a citar algunos de estos capitanes de hierro con sal en las venas del Corcubión del siglo XIX, comandando barcos de la matrícula de este puerto, anotando sus largas derrotas, lo que acredita la justa fama de estos hijos de San Marcos al norte y al sur del cabo Fisterra.
José Agramunt Figueroa (1833-1875) era nieto del corsario Joaquín Agramunt, catalán de Fisterra. Mandaba el bergantín La Luna en 1875 en ruta de Venecia a Almería, cuando resultó muerto tras las heridas en un motín. En 1858 mandaba el pailebot Ferrero de A Pobra, en ruta a San Sebastián. En 1862 el diate Ceferino de Corcubión hacia Tarragona, Gijón. 7 años más de edad tenía su hermano Manuel Agramunt, que mandaba el bergantín goleta San Manuel entre 1856-58. Hacía rutas a Sevilla, Gijón, Villaviciosa, Carril, Burdeos, Alicante, A Coruña.
Manuel Abella manda el bergantín Sagitario entre 1856-58 hacia Cuba, Hamburgo, Liverpool, Barcelona, Torrevieja. Vicente Abella entre 1851-56 lleva el bergantín Ancares a Liverpool, Londres, Barcelona, Cuba. Antonio Abella Rodríguez manda en 1872 el bergantín goleta Nueva Unión a Amberes, Cuba, Hamburgo. Lo comanda en 1869 su hermano José Abella. Vicente Abella Rodríguez manda el bergantín Unión en 1861 a Alicante, Tarragona.
Joseph Baldomar en 1787 manda el patache Nuestra Señora del Carmen y Ánimas hacia Ferrol, Vigo. José Caamaño en 1855 lleva el bergantín goleta Junquera hacia Liverpool, Barcelona, Tarragona, Gijón. Jacobo Casais en 1814 manda el queche San Pedro y Ánimas hacia Luarca, O Pindo. Juan María de Castro Casal en 1865-66 manda el bergantín goleta Nuestra Señora De La Junquera Hacia Tarragona, Vigo, Ferrol. Ramón Díaz Porrúa entre 1852-59 lleva el bergantín Mal Genio a Cette y Ruan (francia), Cuba, Barcelona, Alesund (noruega), Liverpool. Francisco Díaz Porrúa manda el bergantín Los Santos Inocentes a Vigo, Valencia. Ramón Díaz Porrúa en 1847 gobierna la polacra goleta Lagosteira a Barcelona o Cristiansand. Esteban Domenech en 1852 manda la corbeta Luna a Santurce, Barcelona. Domingo Antonio Domínguez en 1832 manda el queche Nuestra Señora del Carmen a Cádiz.
Jose Escapa Bueno (¿Escaja?) en 1847 gobierna el bergantín San Juan Bautista a Trieste, Corck, Falmouth. Juan Ignacio Figueiras Franco lleva la polacra goleta Tres Hermanas en 1868 a Santander, Cádiz. Vicente Fuertes en 1855 manda el queche Ramoncito a Castro Urdiales, Vilagarcía. José García Blanco en 1872 lleva el bergantín goleta San Antonio y Ánimas a Tarragona, Vilagarcía. Gerónimo García Ruíz en 1815 manda el bergantín San Antonio y Ánimas a Lisboa, Bueu, Pasajes, Coruña. Antonio González en 1830 gobierna el bergantín goleta San Francisco y San Antonio a A Coruña, Lisboa. José González comanda en 1852 el bergantín goleta Nuevo Carmen a Cette, Ruan. Ramón Lado en 1842 manda el bergantín Nuestra Señora del Carmen de Torrevieja a Noia.
Francisco de Lema entre 1850-55 manda la goleta Camila a Málaga, Liverpool, Cristiansand, Barcelona, Alesund, Torrevieja o Laxe. Juan de Lema manda la Camila en 1850 a Torrevieja y Noya. Este Juan de Lema entre 1853-56 manda el bergantín Trueno hacia Liverpool, Alejandría, Torrevieja, Cristiansand, Barcelona. Manuel de Lema entre 1858-59 manda la goleta Camila a Torrevieja, Alicante, Santander, Alesund, Ferrol, Barcelona.
Domingo Libarona en 1828 manda el bergantín goleta San Francisco a San Sebastián o Sevilla. Santiago Libarona entre 1835-36 manda la polacra Dulce Nombre de Jesús A Málaga, Vilagarcía, Torrevieja, Gijón. Francisco López García manda el bergantín goleta Nueva Unión en 1867 a Hamburgo, La Habana. Antonio López Vaamonde entre 1858-59 manda el bergantín Ancares a Liverpool, Matanzas, Guayana, Puerto Rico. Domingo Antonio Louro en 1832 manda el bergantín San Francisco y San Antonio en ruta Cádiz-Corcubión. Dionisio Martínez en 1814 manda el bergantín San Antonio y Ánimas a Cartagena, San Sebastián. Herminio Martínez en 1813 lleva el bergantín San Anontio y Ánimas a Oporto, A Coruña. Fernando Menéndez de Miranda manda el velero Nuestra Señora de la Soledad y Ánimas en 1780 entre Redondela y Ferrol. Domingo Antonio Meréns en 1803 manda el bergantín Nuestra Señora de la Junquera y Ánimas entre Salou y Corcubión; y en 1816 entre Torrevieja-A Coruña. Luis Meréns en 1850 manda el galeón San Lucas hacia Vigo. Francisco de Puente en 1821 manda la pinaza San Antonio y Ánimas entre Vigo-Corcubión. Francisco Recamán Quintana en 1871 manda el bergantín Carmen en ruta Amberes-La Habana. Joaquín Riestra lleva en 1828 el bergantín goleta de Fisterra La Antonia Tapabocas de Cádiz a Pontevedra. Manuel Riestra lleva la goleta San Antonio y Ánimas en 1837 de Vinaroz a Santander. Manuel Rivas lleva en 1853 el bergantín Flor, de Cette a Ruan. Ramón Rivas en 1849 lleva el bergantín Unión de Liverpool a Barcelona. Y en 1852 de Agde (Francia) a Liverpool.
Cayetano Rodríguez en 1844 comanda la goleta «Que dirán de mí» de Liverpool a Cádiz-Sevilla. Entre 1850-1861 gobierna el bergantín Estrella en rutas Cristiansand-Barcelona, Jávea-Londres, Liverpool-Barcelona, Torrevieja-Cristiansand, Tarragona-Liverpool, Corcubión-Liverpool. José Rodríguez lleva el queche Santo Christo y Ánimas en 1818 de Vendrell a Ferrol-Ribadeo. Juan Antonio Rodríguez en 1784 lleva el patache Nuestra Señora del Carmen y San Gregorio, de Vila do Conde a A Coruña. Joseph Rodríguez Mayán en 1778 lleva el queche San Vicente Ferrer de Bilbao a Carril. José Rodríguez Trigo en 1838 manda el bergantín Los Santos Inocentes de Torrevieja a Laxe. Gerónimo Ruiz en 1814 manda el bergantín San Antonio y Ánimas de Pasajes a Lisboa. José Senande Pose en 1826 lleva el bergantín San José y La Paz de Cádiz a A Coruña. Andrés Trigo Díaz en 1847 manda el bergantín goleta Carmen en ruta de Le Havre a Barcelona y Valencia.