// Xosé Manuel Lema //
En el cantón de Jura, hay muchos trabajadores de la Costa da Morte. Y del ayuntamiento de Camariñas. La ciudad de Delémont es un ejemplo. Allí vive Isabel Barreiro, natural de Xaviña, que nos confiesa que existe preocupación por todo lo relacionado con el coronavirus.
Nos informa que hay “algunas fábricas cerradas y otras no”. Tiene la impresión de que “no se están tomando medidas estrictas, aunque aconsejan no salir, y las reuniones de hasta cinco personas”.
También indica que algunas empresas de la construcción decidieron parar.”Esto se le puede ir de las manos. Espero que no sea tarde” comenta.
En el mismo cantón, trabaja el joven Martín Méndez, de Camariñas. Su empresa, del sector de la construcción, decidió hacer un “paro técnico” hace unos días. “Estamos en casa. La verdad es que todos queríamos parar porque en este trabajo estamos en contacto con mucha gente a lo largo del día”. Comenta que hay otras empresas que siguen en activo.
«En Basel hay fábricas paradas»
También del mismo municipio es Felipe Lema. Nos atiende desde el cantón de Basilea:”En Basel hay fábricas paradas. En algunas en donde hay muchos trabajadores, mandaron a una parte de ellos para sus casas. El resto sigue trabajando, con las distancias de seguridad”.
Felipe destaca que se nota que en el país no se quiere “parar la producción completamente”. Y que es evidente que el coronavirus se nota “aunque la peor zona está en el cantón de habla italiana(Ticino)”. Más de 70.000 trabajadores del norte de Italia(zona cero por excelencia en este país) cruzan la frontera para trabajar en el Ticino.
Destaca que se ve “menos gente por la calle y toda separada”. Todos están pendientes de la actualidad del país en el que viven, pero sin dejar de seguir las informaciones que afectan a su tierra natal.
