Manuel Sambade
El emblemático hórreo tiene una longitud de 27,3 metros y es, junto los de Lira y Carnota, el tercer hórreo de mayores dimensiones de la Costa da Morte dentro de su tipología.
Sito en la parroquia muxiana de Ozón, paraje por el que discurre una parte del Camino de Santiago hacia Muxía, la emblemática edificación se halla aneja a la Iglesia románica de San Martiño de Ozón y su monasterio del siglo XIV y, gracias a sus espectaculares dimensiones, se sitúa entre los mayores de la Costa da Morte y, por ende, de Galicia. De sus grandes dimensiones dan fe la riqueza que el clero recibía de las gentes de la zona, de las que cobraba el famoso diezmo de las cosechas de los agricultores de la parroquia (que era sobre un 10% de la cosecha total).
.jpg)
22 pares de pies, como Lira y Carnota
La construcción, como orgullosamente destacan los lugareños, iguala en número de pies a sus hermanos de Lira y Carnota y, al igual que el de Lira, fue erigida de una sola tacada, caso contrario al de Carnota que, pese a su fama, es una mezcla de dos edificaciones de 11 y 11 pies, lo que la coloca en un escalafón distinta a los hórreos de Lira y San Martiño de Ozón.
.jpg)
Más largo frente a más ancho
Dejando aparte al de Araño, sito en Rianxo, ya en Barbanza, y que a diferencia de los hórreos anteriormente mencionados, no se apoya en pies sino en una base corrida de piedra, para las disputas locales quedará la espinosa cuestión de qué hórreo (cabazo ou cabaçeira, según el vocablo y pronunciación de las zonas) es el mejor de todos.
Para los de Lira, lo importante es que el suyo es mayor que el de Carnota y fue hecho de una vez. Para los de Carnota, lo destacado es que su hórreo es de mayor capacidad de almacenaje por su anchura y altura. Para los de San Martiño de Ozón, si es que se han planteado dicha pregunta, lo importante, como señalaba una de las vecinas de la localidad “é que a nosa cabaceira é a mellor do mundo”. No se puede decir más con menos palabras.
