José María Zavala: “El Padre Pío llevaba los estigmas de Jesucristo, en manos, pies y costado, sangrando durante cincuenta años consecutivos”. Audio con la entrevista a partir del minuto 35.
El escritor y periodista José María Zavala lleva años siguiendo la huella del Padre Pío de Pietrelcina (San Pío). Todo surgió “cuando unos amigos me invitaron a ver una magnífica película de la RAI que duraba tres horas y media”. Al principio no le hizo excesiva ilusión pero “en cuanto llegué a casa empecé a navegar por internet y me enganchó por la curiosidad del periodista”.
Hoy es autor de varios libros sobre la figura del admirado padre capuchino, ha dirigido la película-documental “Los misterios del Padre Pío” y prepara el lanzamiento de otra producción cinematográfica con “testimonios con una fuerza muy grande” que acreditan conversiones en “Renacidos”.
¿Pero qué fue lo más característico del Padre Pío?- Zavala no duda:”Lo que yo llamo los fuegos artificiales. El don de la bilocalización, la posibilidad de poder estar en dos sitios al mismo tiempo, el don de la profecía (profetizó que Karol Wotjila sería Juan Pablo II, y que en el Cardenal Montini seria Pablo VI o el hecho de llevar los estigmas de Jesucristo, en manos, pies y costado, sangrando durante cincuenta años consecutivos”.
La grandeza del Santo aumenta en cada detalle que aporta el periodista: “Mirándote a los ojos, el Padre Pío te decía hasta el número de domingos que habías faltado a misa desde que hiciste la primera comunión, y en cualquier idioma”.
“El Padre Pío pasaba hasta dieciocho horas diarias en un confesionario lavando almas” comenta José María Zavala, que tuvo la oportunidad de acceder a la documentación del proceso de canonización y dice que hay multitud de testimonios sorprendentes como el de “pilotos de cazabombarderos que afirman haber visto en la cabina del avión a un fraile que no conocían y que le salvó la vida, y que lo acabaron reconociendo al ir a Italia”.
Con sus palabras quiere espantar dudas sobre sensacionalismos o exageraciones: “Los médicos se asombraban. Los informes y los documentos, no son chismes ni habladurías. Me gusta mucho el rigor”.
Sobre el salto al campo audiovisual, el autor bromea:”El Padre Pío me ha montado en su Ferrari y ha acelerado a fondo para salvar almas”.
Aunque reconoce que sus libros han sido un instrumento “para centenares de conversiones de personas con nombres y apellidos”. Cada día recibe en su correo decenas de correos con experiencias. “Es un Santo para los tiempos de hoy” apunta.
