En el siglo XIX, un 13 de mayo de 1844, a la postre día de Nuestra Señora de Fátima, se firma el Real Decreto de fundación de un Cuerpo de seguridad, que sería una de las más completas, profesionales y eficaces policías del mundo, la GUARDIA CIVIL.
El gobierno de la época, encargó al Duque de Ahumada la creación de un Cuerpo especial de fuerza armada encargado de la seguridad en todo el estado. El reto que se le plantea al Duque de Ahumada es poner en marcha una institución que se caracterice por su eficiencia y, en términos del Real Decreto, se destine «a proteger eficazmente las personas y las propiedades».
Su primera misión sería erradicar los continuos asaltos que sufrían las personas en los caminos rurales al finalizar la Guerra de la Independencia; surge pues como la POLICÍA DEL CAMINO.
Desde sus inicios, hace 3 siglos y 177 años, ha servido siempre con abnegación y entrega a todos los españoles, con auténtico espíritu de servicio. Para eso nació y por eso sigue entre nosotros. Ganándose el sobre nombre de «Benemérita», por sus buenos méritos, las incontables vidas que ha salvado, y las muchas que ha perdido por conseguirlo, pagando gustosamente el más alto precio posible, la vida de muchos de sus miembros.
Pero, por desgracia, también le han arrebatado otras gratuitamente, de forma brutal y traicionera. Surge en mi memoria el nombre de José Antonio Pardines Arcay, gallego de Malpica de Bergantiños, primero de una larga lista mortal de la banda terrorista ETA, así como los cientos de guardias civiles que han dado su vida por nosotros en acto de servicio.
Pero si hay una característica que distingue a la Guardia Civil, es su capacidad de adaptación. Fue la Guardia Civil la primera «policía de proximidad», con presencia en todo el territorio. La primera en utilizar perros en su trabajo diario en España y, gracias al SEPRONA se convirtió en la primera policía medioambiental del mundo.
Dispone de múltiples especialidades: TEDAX, Actividades Subacuáticas, Servicio Aéreo, Unidad Especial de Intervención, Policía Judicial, Intervención de Armas y un largo etcétera.
Pero si hay una especialidad visible a los ciudadanos es la Agrupación de Tráfico. Ya en agosto de 1845, un año después de su creación, su fundador expresó su preocupación por la vigilancia de los caminos. Fue en agosto de 1959 cuando se le encarga a la Guardia Civil la creación de dicha especialidad. Y se eligió a la Guardia Civil, entre otras cosas, por su despliegue y por su honradez a la hora de prestar el servicio, y prueba de ello es la erradicación de las «mordidas» habituales en los agentes que vigilaban el tráfico hasta esa fecha. Desde entonces vigila y controla los caminos y carreteras de España con una profesionalidad y dedicación intachable.
Y así sigue, fiel a sus principios, obedeciendo exclusivamente directrices jurídicas y legales, porque la guardia civil no entra en el juego político, no se somete a sus consignas y cumple fielmente su cometido vertebrando a la vez nuestra querida nación española.
Cómo de bien nacidos es ser agradecidos, desde VOX, queremos hacer pública nuestra admiración por este Cuerpo y expresar inequívocamente nuestro apoyo incondicional no sólo a la Agrupación de Tráfico sino a todos y cada uno de los componentes de la Guardia Civil.
Desde VOX os damos las GRACIAS por velar permanentemente por todos los españoles.