– Xosé Manuel Lema-
El recordado Félix Rodríguez de la Fuente lo definía como “un adorno de los cielos”, desde la mítica serie “El hombre y la tierra” no ahorraba elogios.”Seguramente no hay animal tan hermoso, tan veloz, tan vigoroso y tan perfecto como el halcón, para ser el representante mitificado y vivo del sol”. Recordaba a los griegos que homenajearon al ave a través del Dios Horus.
El doctor Rodríguez de la Fuente personalizaba en los halcones peregrinos, como su “Durandal”:”El más bonito, el más grande y el más veloz de nuestros halcones, es el halcón peregrino”.
Entrevista a Lino Vázquez- Desde minuto 65
Con la ayuda del veterano cetrero, Lino Vázquez, quisimos acercarnos un poco más al “falco peregrinus”. Lleva décadas vinculado a estas aves, y a otras, mediante exhibiciones, la cría en cautividad, el control de fauna de aeropuertos y en otros espacios como en el complejo de la Alhambra de Granada, o en la divulgación.
Este último es un apartado que considera clave: “El futuro de las aves rapaces depende de que los niños los entiendan un poco, que no se aparten de la naturaleza”. Y desde niño en su Sober natal sintió esa cercanía:“Yo creo que se nace con esa pasión. Siempre me fascinaron”.
En los aeropuertos un equipo de halconeros profesionales para evitar que otras aves afecten al vuelo de los aviones. También son muy importantes para controlar la sobrepoblación de estorninos, palomas o gaviotas.Y no faltan las competiciones de cetrería “que sirvieron para dar a conocer la actividad”.
Con respecto al halcón peregrino dice:”Es de las aves más bellas y más fascinantes que hay en todo el planeta. Son superpredadores. Animales que la naturaleza diseñó hasta límites insospechados”.
Las características de los halcones peregrinos son un atractivo para ingenieros aeronáuticos y pilotos:”los pilotos de caza de combate me visitaban en los aeropuertos para presenciar el vuelo de los halcones, se quedaban embelesados”.
Es espectacular lo que nos cuenta. Ver un macho de medio kilo de peso o una hembra de menos de un kilo “precipitarse alcanzando una velocidad próxima a los 400 kilómetros por hora”.
Mitos sobre la alimentación de los halcones
Lino Vázquez también desterró mitos y leyendas urbanas sobre la alimentación. “Comen una sola vez al día y muchos días ayunan porque no consiguen captura” señala. Una hembra de halcón peregrino se come, lo equivalente,a una paloma y un ejemplar macho aproximadamente la mitad.En la cría en cautividad suelen darles codornices, pollitos o alas de pollo, congeladas.
“Las aves rapaces no se mueven por el concepto de hambre. Trabajan por hábito. Saben que para comer tienen que cazar. Pero podrían no comer un día” aclara.
La reproducción es la habitual fruto de la relación entre la pareja pero “los halcones no hacen nidos, se limitan a escarbar un hueco para que los huevos no rueden. Al cuidador solo le queda esperar”.Hay otras alternativas como la inseminación artificial.
Otro tema muy curioso es la relación entre el halcón y su cuidador.”El halcón improntado diferencia perfectamente a su cuidador. Y el apego se ve incrementado en la época de celo”.El grado de mansedumbre es grande, y al ser criados a mano “se integran en la vida humana, es la que conocen”.Entre ellos, los halcones solo se unen en determinadas etapas. “Suelen juntarse cada primavera. El resto del año se ignoran”.
Sobre el adiestramiento de los halcones peregrinos, Lino Vázquez comenta que “no es complicado pero siempre es mejor iniciarse en el mundo de las avaes rapaces de la mano de alguien que esté un poco rodado”.Advierte que es una afición con “dedicación intensa” y que “lo que no se puede transmitir es la pasión”.
Los precios de los halcones no son desorbitados
Tampoco es algo prohibitivo. El precio de los halcones no es inalcanzable:”Cualquier persona puede comprar un ave rapaz por un precio módico. Se puede conseguir un halcón, un cernícalo o una aguililla de Harris por debajo de los 500 euros. No tienen precios desorbitados”.
Como en todo “hay determinados ejemplares” que se cotizan más pero “la mayor parte se mueve en precios de mil euros, y no solo son para los jeques árabes”. Eso sí, insiste, “no todo el mundo está dispuesto a sacrificarse”, en la atención que requieren las aves.Lino Vázquez es un ejemplo. Como también lo es el naturalista y cetrero Juan Ávalos, fanático del “halcón sacre” y con el que ya hablamos en otra ocasión.
