SHADOWSTRIKE – TRAVELER’S TALE (2023) – AUTOEDITADO
Segundo LP de los norteamericanos ShadowStrike, sin duda unos de los estandartes del nuevo Power Metal americano, una banda que, aún desde el underground, ha sabido hacerse un hueco importante en la escena.
La formación liderada por Matt Krais acaba de autoeditar este Traveler’s Tales, segundo trabajo de su carrera, un disco que aún siendo muy esperado por la escena no ha conseguido recabar el apoyo de ninguna discográfica, cuanto menos curioso, claro paradigma de la situación actual que vive el mundo de la música.
Una pena, ya que la única opción de hacerse con el plástico es comprándolo directamente en el bandcamp de la banda, con todos los costes que supone para el comprador, en mi caso, además de gastos de envío, que no fueron baratos, me acabaron repercutiendo también los tributos de aduana.
Musicalmente hablando, este Traveler’s Tales continúa adelante con los postulados mostrados en su anterior Legends of Human Spirit del año 2019, es decir Power Metal muy azucarado en las melodías, muy ampuloso en coros y arreglos, y todo ello con una ejecución veloz y tremendamente intensa.
El sonido vuelve a estar muy influenciado por bandas como los británicos DragonForce o los, al parecer ya desaparecidos, polacos Pathfinder, con ese Power Metal incendiario y desatadamente ágil como principal reclamo.
El disco ha sido grabado en EEUU, pero con mezcla y masterización en Europa, en concreto en Suecia, en Fascination Street Studios, de la mano de Jens Bögren y todo su equipo, con todas las garantías que ello conlleva.
Shadowstrike, power metal enérgico y frenético
Casi 60 minutos de Power Metal enérgico y frenético, ejecutado con la precisión de un reloj suizo, con un gran trabajo en cuanto a líneas melódicas se refiere, principal reclamo del LP, impactante desde sus estribillos, corales y arreglos orquestales.
Toda la banda se ha implicado en la composición, con cada músico aportando lo mejor de sí, tanto desde el punto de vista creativo como meramente interpretativo, con Matt sensacional a las voces y coros, con Sean Walls impecable a las guitarras, Ryan Patane imprescindible a los teclados, y Zak King demoledor y puntilloso a la batería.
Power Metal con mayúsculas, todo un regalo para los fanáticos del género, de los que me considero parte, toda una delicia para mis oídos, la máxima grandilocuencia del género a disposición de los oídos más exigente.
Canciones sencillamente irreprochables como, por poner algunos nombres, «Broken Hearted Journey», «Decisive Battle» o la enorme «Woodland Nights».
¿Se puede hacer un disco mejor dentro del género en los tiempos que corren? Difícil..