Diez años, nada más y nada menos, han tenido que pasar para que volvamos a disfrutar de nueva música de los franceses Spheric Universe Experience. He de reconocer que los galos son una de mis debilidades dentro del ProgMetal europeo, con discos impecables e indispensables como su Anima de 2007, prácticamente perfecto, o su genial Unreal de 2009.
La música no es fácil y la prueba de ello es que una banda del talento de la que nos ocupa haya tenido que esperar 10 años para grabar y editar su nuevo trabajo, puesto en circulación, dicho sea de paso por la modesta Uprising Records.
Back Home no defrauda, manteniendo intactas todas las señas de identidad de los galos, eso sí, probablemente algo más terrenal en cuanto a melodías y arreglos de lo que fueron trabajos estelares como los anteriormente citados.
En este sentido la banda trata de explorar un perfil, como decía, más accesible, más próximo al Power Metal por momentos, pero, insisto, siempre manteniendo sus raíces, con ese ProgMetal de autor tan característico como elemento catalizador de toda su propuesta, como se pone de manifiesto en canciones como «Where We Belong» o incluso en la parte final con «The Absolution», incluso con guiños a la escena sinfónica.
La banda conserva intacta la parte creativa de su line up, con la dupla Vince Benaim/Fred Colombo a las guitarras y teclados respectivamente, de nuevo realizando un trabajo colosal, Vince tiene un gusto desbordante en todas sus líneas melódicas, figuras rítmicas y arreglos solistas, mientras que Fred es un genio a la hora de colorear y perfilar cada arreglo a base de sintetizadores, teclados u orquestaciones.
Por su parte, Franck García continúa liderando todo el combo desde los micros, con su personalidad habitual, si cabe más melódico y edulcorado en sus modulaciones, personalidad y calidad a raudales en su líneas vocales.
El disco es una delicia, es cierto que en mi opinión algo largo, pero repleto de momentazos súper álgidos, con canciones geniales como «Legacy», «Senses Restored», probablemente lo mejor del plástico, con esas estructuras sincopadas y esos compases irregulares tan marcados y tan personales, o la misma «Transcending Real Life», otra prueba del talento melódico que acreditan, muy vinculada con propuestas como la de los noruegos Circus Maximus.
Talento y más talento desde Francia de manos de una de las formaciones más originales, solventes y eficaces de todo el Prog europeo.
