ADVENTUS – SAUDADE (MALDITO RECORDS) 2022
El universo Adventus saltaba por los aires hace unos días…
El proyecto liderado por el gran Manuel Ramil, gestado en plena pandemia, con la edición de su disco debut en Enero de 2021, explotaba en mil pedazos hace unas semanas tras un tajante comunicado de renuncia firmado por toda la banda a excepción del gallego. Víctor García, Fernando Mon, Alberto Ardines y Luis Melero rubricaban una nota en sus redes sociales anunciando el fin de sus días en la banda, sin dejar muy claros los motivos, pero cargando responsabilidades en la espalda del músico de Ares.
Pues bien, en medio de esta tormenta, tan sólo unos días después del citado comunicado, veía la luz este Saudade, el segundo trabajo de la banda y probablemente el último, un disco de nuevo escrito en su integridad por Ramil, ocupándose también él mismo de todo el trabajo técnico de producción, mezcla y masterización en sus Tercera Planta Estudios de Ares, Galicia.
Una pena, sin duda, no en vano la banda había vuelto a realizar un gran trabajo, desarrollando un álbum todavía más maduro que su debut, en mi opinión, algo más denso y en perfecta alineación con su título, un disco que suena a despedidas, a melancolía, a amor en la distancia…
Saudade es un disco corto, poco más de 48 minutos, todo un acierto, poniendo en todo momento la carne en el asador, sin momentos vacíos, sin relleno… El LP se abre con «Lo Siento», todo un temazo, de lo mejor que han escrito en estos dos trabajos, un tema ambicioso, repleto de compases irregulares, guitarras tortuosas y cierto aroma Prog que me encanta, una virguería, coronado con un solo de guitarra excelente entendido desde el prisma de la escala menor armónica.
«Llorar No Sirve de Nada» fue el primer single, una canción que entra a la primera, construida sobre un riff de teclado que es una delicia. Todas las líneas melódicas son para enmarcar y su estribillo se graba a fuego en tu mente.
«Mi Respuesta» es otro de lo mejores, un corte muy grueso en la instrumentación, con aires de medio tiempo y una melodía central muy marcada. Montones de arreglos de piano, guitarras limpias, un bajo muy profundo y una línea de voz exquisita.
«Fundirme Con el Viento» es una oda a la melodía, un corte más sencillo, a medio camino entre el Power Metal melódico y el Hard Rock más cristalino, con los teclados tremendamente azucarados y de nuevo con un estribillo cargado de magnetismo.
«Renunciar Al Sol» fue el segundo adelanto, puro Power Metal de corte europeo, con los teclados hiper protagonistas, dibujando riffs, melodías y arreglos que llevan en volandas al resto de la banda. No hay solo de guitarra, sustituido por un solo de teclado magistral. Intensidad, melodía y muchísimo ímpetu desde las voces.
«Casi Sin Querer» es otra maravilla, otro medio tiempo de formato clásico, de nuevo muy europeo en su sonido y en sus dinámicas. Todo el trabajo de guitarras vuelve a ser espeluznante, con un gusto extraterrestre en todos los arreglos y dibujos rítmico/melódicos.
El estribillo vuelve a ser mágico, engarzado con la siguiente estrofa con un arreglo de teclado hiper bombástico que pone el vello de punta. Llegando al final aparece «Vulnerable», otra vez rocoso desde la instrumentación, sosegado en las estrofas y muy intenso en los estribillos, de nuevo repleto de arreglos y capas y capas de teclados y guitarras.
«Dime» es probablemente mi favorito, con uno de los mejores estribillos del plástico, con una dinámica que es pura electricidad estática, con las guitarras inmensas, tanto en grosor como en eficacia y efectividad, de nuevo versátiles y exigentes en todas sus figuras, tanto rítmicas como solistas.
Y para acabar «Aprendiendo a Caminar», comandada por un piano central para enmarcar y unos arreglos de teclados especialmente ampulosos, de nuevo sin renunciar a un trabajo de guitarras otra vez muy completo. Power Metal muy exigente, con todas las melodías de voz muy cuidadas, marca de la casa, con un gusto fuera de toda duda en arreglos, dinámicas, figuras melódicas…
Saudade es el mejor disco de despedida posible, el fruto del esfuerzo y del talento de uno de los músicos con más talento y con mejor gusto de todo el país. Víctor en su mejor versión a las voces, Fernando Mon extraterrestre en las guitarras, enhorabuena, y el citado Ramil liderándolo todo desde sus imponentes y protagonistas teclados.