//Rafael Lema//
«La División Azul. De 1941 a la actualidad» (La Esfera de los Libros) del historiador manchego Carlos Caballero Jurado se puede considerar la obra más completa sobre la famosa Blau División, La División Española De Voluntarios enviada por la españa de franco a luchar contra el comunismo en el frente ruso en el marco de la segunda guerra mundial. sin duda, caballero es uno de los grandes conocedores del tema, al que se lleva dedicando desde 1981, dejando un abundante e imprescindible trabajo en libros y artículos en este tiempo. También es uno de los más comprometidos defensores de la realidad de este grupo de heroicos jóvenes y de las circunstancias especiales de su época, documentando cada una de sus apreciaciones y desmontando con esos datos tantos otros trabajos que nacen con otros afanes distintos a la recuperación de la memoria y la historia.
La División Azul, elemento imprescindible en la geopolítica de la época
Así con todo lujo de detalles, 50 fotografías y 25 mapas originales, describe la vertiente militar de la Blau, y su valía en la confrontación bélica, sus combates más importantes dentro de la estrategia de los dos colosos enfrentados en el más terrible de los frentes de la contienda, los actos relevantes de unos jóvenes soldados idealistas que se llenaron de gloria y condecoraciones en circunstancias extremas; pero además trata a la DEV como un elemento imprescindible en la geopolítica de la España de su época, que evitó la entrada de España en la guerra, al tiempo que intentaba calmar al poderoso vecino alemán que reclamaba mayor aportación a su aliado desde el otro lado de los Pirineos.
La campaña militar de la DA para el autor se divide en varios ciclos de combates. Las batallas en el sector del río Voljov y los combates en el sector de Leningrado, con la acción de Posselok o la batalla de Krasny Bor, de la que hemos publicado en este medio no pocos artículos. Centro de atención también del trabajo de investigadores ligados a la HDA Spanky Jarashó de A Coruña como Lorenzo Fernández Navarro o Antonio de Andres y Andrés. Y estamos a al espera de la publicación del primer diario de un divisionario gallego, el del corcubionés Tito Mosteyrín.
Los datos aportados van página a página desmontando tantos tópicos interesados nacidos en la posguerra y aún hoy repetidos por otros autores falsarios y con más compromiso ideológico que con la ciencia de Herodoto. Conocemos los detalles del nacimiento y la organización divisionaria, un autentico cuerpo de ejército expedicionario que movilizó a 50.000 soldados; de su carácter de cuerpo voluntario con dos almas, salido de una idea falangista pero a la que se quiso incorporar el ejército de forma sustancial, dando continuación a la guerra de la civilización occidental contra el comunismo, de la que también fue pionera.
Su valor en la política exterior española y también en los asuntos internos, en la propaganda y la política, sus repercusiones tras el cese de la guerra, el caso de los prisioneros de guerra que tuvieron que esperar a la muerte de Stalin, la situación de los ex combatientes y la labor de las hermandades, la actualidad de los estudios o el asociacionismo vinculado a la Blau.
El autor se esfuerza por esta visión global de la Blau dentro de la Wehrmacht, desde su fundación en 1941 hasta la actualidad, aportando en 827 páginas las vivencias más íntimas de los combatientes en su largo trabajo de investigación, con las entrevistas a los protagonistas, visitas a numerosos archivos y aportando una amplia bibliografía.
