El ayuntamiento de Camariñas celebró el primer pleno ordinario de la legislatura. Se dio luz verde a la adhesión a la Red de «Cidades Saudables» con los votos de PSOE y PP y la abstención del BNG. Se acordó destinar los casi 300.000 euros del Plan POS + Adicional a financiar gasto corriente.
La alcaldesa Sandra Insua(PSOE) se quejó del aumento de gastos, como el consumo eléctrico y un nuevo canon de saneamiento impuesto por la Xunta.
La portavoz popular, Paula Mouzo, aseguró que estos problemas financieros “son froito da vosa mala xestión”, algo a lo que también se refirieron desde el BNG.
Se aprobaron varias modificaciones de crédito para destinar una partida e 873.000 euros y otra de 67.000 euros para pago a proveedores.
Subida de Tasas
La oposición se abstuvo en estos puntos y votó en contra de la subida de las tasas culturales y deportivas. Sandra Insua justificó que se llevan 12 años sin actualizar las tasas de un servicio deficitario “e algo hai que subir”.
“Non é o momento de subir impostos nin taxas por baixos que estean hai que xestionar mellor os recursos que temos para que non afecten os bolsillos dos veciños” declaró Paula Mouzo.
Xurxo Rodríguez(BNG) optó por “regular as bonificacións” y que la subida de tasas se hiciera “paseniñamente”. Desde el gobierno socialista se explicó que estos servicios generan un gasto de 400.000 euros y unos ingresos.
Mociones
El BNG presentó dos mociones que no salieron adelante. Una referida a las tasas de actividades de verano. La alcaldesa aclaró que eran gestionadas por una asociación. Y otra para que se elabore un plan de mantenimiento de aceras y caminos. “Coñecemos perfectamente o estado de todo. Sei perfectamente o que está mal pero teño que priorizar”, dijo la alcaldesa.
Salió adelante, con los votos de PSOE y BNG, una moción en contra de la política educativa del Partido Popular. El PSOE pedía un cambio en la “política de suprimir” de la Xunta, que se garantice el número de profesores o que se recupere la gratuidad universal de los libros de texto.
El PP echó en cara que fue durante la etapa del bipartito cuando más escuelas se cerraron y defendió el aumento de inversión educativa del gobierno autonómico aunque “todo é mellorable”. Se incluyeron en la moción, unas propuestas del BNG sobre el idioma gallego.
Numerosos ruegos y preguntas de PP y BNG
El turno de ruegos y preguntas fue amplio. La popular Paula Mouzo pidió acometer limpiezas y desbroces “porque estamos invadidos por la vexetación”. Desde el ejecutivo afirmaron estar “desbordados” y reconocieron que la situación está “peor ca nunca”.
El PP pidió el asfaltado de la calle Pións de Camariñas, y mejoras en las aceras de Camelle, entre otras cosas.
Por su parte, el BNG también se preocupó por el estado de las aceras en Camelle y por la necesidad de poner una cubierta en el parque infantil de Campo da Area, por la falta de iluminación la zona de A Esquipa(Ponte) y planteó que se pida a la Xunta “a limpeza e coidado dos ríos”.
En el turno de preguntas, el PP preguntó por Aldea Madeira. Sandra Ínsua explicó que el pliego del concurso estaba hecho y estaban pendinentes de unas aclaraciones sobre el tipo de suelo.
Mouzo Mas se interesó por el contrato de limpieza de edificios por valor de 357.000 euros. Según fuentes municipales hay cuatro empresas interesadas.
Badenes de Mourín
También trasladó la “preocupación” por los badenes de Mourín. El PSOE señala que no hay tal inquietud vecinal. “Só unha persoa protestou por iso, os demáis queren máis badéns”. Además el PP preguntó por la situación de la Fonte do Caño en Camelle y por la Fonte de Rendeiro, en Ponte do Porto. La primera se está intentando localizar el punto de procedencia del agua. En cuanto a la segunda, por el momento, no está prevista la rehabilitación de la fuente, porque hai otras prioridades.
Xurxo Rodríguez Baña interpeló al gobierno sobre varias cuestiones relacionadas con un proceso selectivo de capataz. Entre otros asuntos el BNG se preocupó por las limpiezas después de las fiestas, el estado del parque biosaludable de Area da Vila, o por la depuradora de Portocelo. En este último punto, Sandra Insua informó que la gestión corresponde a la Xunta.