Cinco votos de los ediles del Partido Popular y de los no adscritos Mónica Vilela y Manuel Caramés sirvieron para tumbar el POS 2022 del ayuntamiento de Muxía.
Sandra Vilela(PP) y Mónica Vilela reprocharon la falta de diálogo y de palabra por parte de un alcalde, Iago Toba que calificó de “vergonzoso” y “cacicada” el rechazo al Plan de Obras.
Desde el PP acusaron al regidor de mentir “xa que a depuradora de Quintáns non está no POS”. Y de incumplir su palabra y sus obligaciones como mandatario de negociar con el resto de la corporación:”Se non hai POS será pola súa culpa”.
En la misma línea se expresó Mónica Vilela:”O deber dun goberno en minoría é o de coller o teléfono e chamar á oposición. Dixo que ía a consensuar e non fixo nada”.
El BNG votó a favor. Carlos Concheiro explicó que había llegado a un “acordo de mínimos” con el gobierno del PSOE, y que el mismo tomó la iniciativa “para buscar unha solución”. Con todo ello, lamentó que “non se xestiona dunha forma aceptable”.
Iago Toba dijo sentirse “indignado” y acusó los ediles que votaron en contra de “roubarlle ós veciños de Muxía”.Para Toba estamos ante “un plan moi bo que recolle as demandas da oposición”, que está “centrado no rural muxián” y responde a demandas vecinales. La sesión terminó despues de un cruce verbal y del abandono de los ediles no adscritos y del PP de la sesión.
Los ediles del PSOE y BNG concluyeron la sesión aprobando el Plan POS adicional de gastos sociales extraordinarios dotado con 75.504 euros.