Rafael Lema
Estamos en la última fase de recogida de algunos frutos y en muchas huertas particulares de la zona siguen brotando auténticos fenómenos de la naturaleza. Por ejemplo en una huerta del lugar de dor en la parroquia de Ponte do Porto, en la ría de Camariñas, un peral destaca por dar unas peras que suelen pasar del medio kilo e incluso varias pasan de las tres libras, alcanzando una el récord de 650 gramos. Son de las que antiguamente se llamaban «de catro na cunca», porque superan la libra y con tres o cuatro se completaba un kilo, aunque en estos tiempos convulsos el peral porteño en cuestión ha desbordado las expectativas.
Según su propietaria Begoña Pensado Romero este año recogió «pocos frutos del peral pero todos los ejemplares fueron realmente impresionantes, y sin cuidado ninguno». Las últimas cinco peras salieron ayer mismo de las ramas del árbol y alguna alargará unos días su estancia en la alacena en forma de compota.
