//Manuel Sambade//
El negocio de remendar calzado no se está beneficiando de la crisis, tal y como auguraron algunos expertos. No solo no hay más volumen de trabajo en las tiendas de reparación de calzado, sino que se observa un aumento de zapatos baratos, de baja calidad que, en muchas ocasiones, no merece la pena arreglar.
En estas ideas coinciden varias de la veintena de tiendas de reparación de calzado que aún existen en la comarca. Una de ellas es Artifex, en el Centro Comercial Finis Terrae, en Cee. «Lo que viene con la crisis es más calzado de peor calidad. La relación precio del arreglo y precio de un par nuevo de ese tipo de calzado hace que mucha gente se lo piense. De todos modos, hay veces que es mejor no coger esos trabajos porque no siempre se puede dar garantía de que perdure el arreglo. Casi un 40% de lo que viene de ese tipo de calzado lo echo para atrás», cuenta la responsable del establecimiento, Marísol Piñeiro Gándara.
Más crisis, más zapato de baja calidad
A juicio de esta profesional, el zapato que merece la pena arreglar es el que ha costado dinero, confeccionado con materiales de calidad como son el cuero y caucho (goma). “Cuando el zapato te ha costado cien euros o más, sí merece la pena arreglarlo, pero sino, hay que pensarlo”. Gándara señala como barato el calzado que se vende en las denominadas “tiendas de chinos” y en algunas franquicias de ropa.
Afirma la reputada zapatera que, pese a las previsiones de que la reparación sería la salida de las economías domésticas frente a los tiempos del “usar y tirar” de los momentos álgidos de locura consumista, eso no es, ni de lejos, lo que en verdad sucede y, de hecho, asegura que sigue manteniendo el mismo volumen de trabajo que en los tiempos de abundancia económica. “Eso de que la crisis nos iba a favorecer no es en absoluto cierto”, cuenta. Tampoco cree que los consumidores estén alargando más la vida del calzado, pero coincide con sus colegas en que se nota un claro aumento del calzado “made in China”.
Lo barato, a la larga, es caro
“El ejemplo típico del zapato de mala calidad es un zapato de material plástico, con suela de plástico y plantillas de cartón. Suele resbalar mucho”. Este tipo de calzado supone el 20% del que entra en su tienda. “Va aumentando porque las chicas jóvenes prefieren tener tres pares de botas que uno. Lo que pasa es que es un calzado en el que el pie no transpira y que con una lluvia se deforma y se estropea”, añade. Para la propietaria de Artifex su elección de calzado sigue siendo la del calzado «clásico», el de cuero con suela de caucho o de cuero.
«Si se les pone unas suelas y tapas cuando los compras no se deforman tanto y aguantan más, pero mucha gente viene cuando ya los ha usado un tiempo». Además, como indica Piñeiro, los arreglos en el calzado de peor calidad suelen ser más costosos y requieren mayor esfuerzo a los zapateros. “Hay que trabajarlos de manera diferente. Por eso, lo primero es la honestidad con el cliente.
Se le dice el presupuesto para que valore si, realmente, le merece la pena el arreglo”. En más de una ocasión, los clientes desechan la opción de poner suelas y tapas nuevas. “Hay veces que la gente no se deja asesorar y quiere arreglar un determinado par de zapatos porque les tiene cariño y no encuentran otros parecidos”.
Conservar el calzado adecuadamente
Colocar suelas y tapas a un zapato nuevo de calidad que se haya adquirido antes de que se gaste mucho, para que el deterioro no sea irrecuperable, es uno de los consejos que suelen dar en las tiendas de calzado. Sin embargo, no siempre se suele cumplir. «Antes venía mucho zapato recién comprado para que le pusiéramos tapas y suelas antes de estrenarlo. Ahora, en cambio, se ve muy poco», «Supongo que la crisis se nota en todos los lados».
Para esta profesional, es «lógico» que muchas personas se planteen el arreglar o no un determinado tipo de calzado. “Si hoy por 30 euros puedes comprar un zapato y le dices que arreglarlo le va a costar 15 pues entiendes que ellos se lo piensen antes de tomar una decisión. Al final, arreglarlo o no es una postura muy personal”.