//Manuel Sambade//
La concentración de protesta, que tuvo lugar ayer delante de la oficina de Correos de Cee y en la estación de autobuses y al reivindicó una solución ante lo que desde el Comité de Empresa y Junta de personal califican de “grave situación que están sufriendo algunos de los trabajadores y trabajadoras de la Unidad de Reparto de Cee”.
Según el Comité de Empresa y Junta de personal de Correos, en Cee se estarían dando situaciones como que el personal eventual llegaría a un primer puesto sin formación práctica ni teórica facilitada por la empresa, lo que, aseveran, dificultaría el correcto desempeño de las ya de por sí complejas secciones de reparto, especialmente en el rural.
Denuncian, también, que las “actitudes despóticas de algún jefe”, no son un caso aislado y exclusivo de Cee, sino que afirman tener constancia de que estas actitudes están siendo alentadas por algunos jefes de sector, y frases como “ya me dijo el jefe que aquí mandaba yo y se hace lo que yo diga”, serían práctica habitual “cuando el personal reclama un derecho recogido por ley”.
“Trato esclavo” al trabajador
Alertan, además, ante lo que tildan, de manera harto gráfica, de actitudes que, a su entender, en la Unidad de Reparto de Cee rayarían el “esclavismo”, y apuntan que tales acusaciones vendrían fundamentadas en que, como denuncian el Comité de Empresa y Junta de personal de Correos, en la localidad ceense se estarían dando prácticas tales como repartir el trabajo y el salario de un contrato entre dos personas, “para no sufrir una evaluación negativa, que supondría la incapacidad de trabajar de nuevo e incluso poder presentarse a las oposiciones futuras para personal de Correos”.
Denuncia ante las altas instancias
Tales hechos ya habrían sido puestos en conocimiento del Presidente de Correos y el Director de la Zona nº 1 con el fin de que, “con la mayor brevedad posible” se lleven a cabo las pertinentes indagaciones tendentes a esclarecer la veracidad de tales hechos y, caso de constatarse tal praxis, llevar acabo las medidas correctoras correspondientes, incluyendo, de ser preciso, el cese de los mandos responsables de las presuntas prácticas denunciadas.
