El pasado mes de octubre un grupo de personas se reunían para celebrar el 50 aniversario de la fundación del club de acólitos de la parroquia de San Martín de Tours, en Reque, en la provincia peruana de Chiclayo. Tal y como nos informa uno ellos, nuestro amigo Manuel Cumpa González, en el encuentro hubo un recuerdo muy especial para el religioso xalleiro Ángel Rieiro Alvite, que “auspició, apoyó y respaldó” esta entidad.
Aquellos niños que se formaron al lado de Ángel Rieiro, acabaron creando el grupo musical “Los Sherkos”. El reportaje publicado en El Correo Gallego y en Adiante Galicia ha sido leído con cariño en las tierras andinas: “Todo esto nos hace sentir más orgullosos de haber sido sus discípulos”.
De hecho coincidiendo con el aniversario de Ángel Rieiro, cada año un grupo de amigos se reúne para recordar a una persona “con quien congeniamos y vivimos momentos muy importantes, asimilando sus consejos, soportando nuestros deslices”. En el blog de Los Sherkos, definen al Padre Ángel como “una persona muy jovial, muy activo y emprendedor, y muy comprometido con su misión”.
En el templo en donde el sacerdote de Santa Comba ofició
Los Sherkos mantienen viva la memoria de Ángel Rieiro
Como recuerda el padre Guillermo Areán en un artículo, en Reque, Rieiro “desarrolla una labor evangelizadora muy amplia dándole mucha importancia a la formación de catequistas e impulsando una cooperativa de ahorro, que beneficiase a sus feligreses”.
Sin duda estamos ante una persona que desarrolló una labor impresionante durante sus años de estancia en Perú, que es digna de reconocer y poner en valor. Aunque también conviene resaltar la calidad humana de todas las personas, que como Los Sherkos, lo siguen honrando y agradeciendo todo el tiempo que les dedicó.
De hecho, como se puede ver, en el centro del cartel del cincuenta aniversario aparece la imagen de Ángel Rieiro.
