El jefe territorial, Manuel Rodríguez, se compromete personalmente al impulso definitivo de la concentración. El decreto se aprobará este año.
Hoy en el multiusos todos hablaban de concentraciones parcelarias. Salieron los vecinos de Arantón y Santa Sabiña y entró un centenar de propietarios de la parroquia de Freixeiro, que llevan décadas escuchando hablar de la concentración como quién oye un cuento repetidas veces.
El jefe territorial de Medio Rural, Manuel Rodríguez, era consciente de ello y quiso empeñar su palabra ante los presentes, y también ante este medio de comunicación. Se comprometió a ejecutar la concentración en esta parroquia en un plazo de cinco años.
Rodríguez Vázquez reconoció que el proceso de Freixeiro fue “una anomalía”, y que hubo que declarar su caducidad para poder volver “a empezar de cero”. Próximamente se deberán actualizar las bases, y elegir, en una asamblea vecinal, una junta de clasificación para valorar las fincas.Ante la inquietud generada en el auditorio, Manuel Rodríguez dejó claro que la opinión de los miembros de la junta no es vinculante y que “a decisión final será dos técnicos”.
El jefe territorial quiso poner en valor las concentraciones, al margen del hecho de agrupar tierras ya que además pemitirá abrir nuevos accesos, y que los propietarios cuenten con una cartografía y títulos registrales “que dan seguridade xurídica”.La alcaldesa de Santa Comba, María Pose, fue la encargada de abrir el acto y destacó la importancia de esta actuación para la parroquia de Freixeiro.
Según explican desde la Xunta, en los últimos meses se trabajó en el estudio previo y a lo largo de este año de espera que se apruebe el decreto.Por las intervenciones de varios presentes parece que el anterior proyecto dejó heridas abiertas y malas experiencias. Ahora, parece que de esta vez irá la vencida.
