Obras de desbroce descubren huesos humanos y el muro de la antigua necrópolis de Cereixo
Rafael Lema
Unas obras de limpieza en el paseo fluvial de Cereixo en el municipio de Vimianzo han sacado a la luz algunos restos procedentes del antiguo cementerio, que rodeaba a la iglesia parroquial románica de Santiago de Cereixo, en una extensión superior a la actual.
Así al arrancar unos árboles y limpiar el terraplén que separa los muros del atrio parroquial del paseo, han salido a la luz restos humanos, como una tibia y otro hueso de una extremidad. También se aprecia tras el desbroce y bajo la raíz de uno de los árboles arrancados una serie de piedras que podrían formar parte del muro antiguo que cerraba el atrio en una capa inferior al terreno actual y por ello más antigua.
La iglesia de Cereixo es un bello ejemplar del románico finisterrano pero construida encima de una anterior tras la destrucción de la primera población por una incursion marina, de sarracenos o normandos. Presenta como principal elemento artístico la primera escultura del traslado del cuerpo de Santiago a Galicia en el tímpano del pórtico sur, del mismo taller de la puerta sur de la vecina iglesia abacial de Moraime, entorno al 1.200.
En este mismo siglo Cereixo obtiene título de villa en tiempos de Alfonso IX que visitó el lugar en 1228. El románico peculiar de la ría de Camariñas según el profesor Ferrín Izquierdo procede de un taller que trabajó en la catedral de Santiago de Compostela e irradió este arte tras finalizar su labor en el templo metropolitano.
En las obras de restauración acometidas en Cereixo hace dos décadas se descubrieron restos de un incendio en la nave central y la tumba de un noble. En el siglo XIX se acometió el cierre del atrio, pero tras el nuevo muro quedó esta zona de terraza que da al río que baja de Carnés y desemboca en el Grande do Porto y la ria de Camariñas.
