La ordenanza fue aprobada por unanimidad en un pleno en el que también se dio el visto bueno a varias iniciativas presentadas por la oposición.
Milagros Lara
La ordenanza de transparencia del ayuntamiento de Betanzos propuesta por la alcaldía fue aprobada por unanimidad en el pleno celebrado ayer. Paradójicamente la ordenanza sobre transparencia recibe su aprobación inicial cuando se cumplen varios meses en los que el ejecutivo no emite los plenos de la corporación por la emisora municipal.
El reglamento sobre transparencia, a pesar de obtener el voto favorable de todos los grupos municipales, con los elogios de Betanzos Novo y Betanzos en Común, recibió críticas por parte de algunos portavoces por lo que creen que no es más que el cumplimiento de una obligación legal impuesta por la Ley de Transparencia de 2013 y una operación de maquillaje de la actitud del gobierno.
En este sentido fueron significativas las frases del portavoz del BNG, Henrique del Río, quien pidió “que a información que dea o concello se axuste á realidade” o la de Pablo Tomé, ejerciendo de portavoz del PP, que subrayó que la ordenanza es de importancia “dependiendo del uso que le dé el gobierno”. Tomé pidió un cambio de actitud del gobierno socialista al que achacó falta de transparencia y de ocultación de información porque si no es así “estaremos perdiendo el tiempo”.
Placa conmemorativa en la sede betanceira de As Irmandades da Fala
La ordenanza fue la única propuesta presentada por el ejecutivo socialista, además de los trámites habituales de aprobación de actas y dar cuenta de los decretos de alcaldía. Como viene siendo habitual en Betanzos, la iniciativa la llevó a cabo la oposición quien en esta ocasión elevó a pleno ocho mociones.
Recibió aprobación unánime la propuesta del BNG sobre la colocación de una placa conmemorativa en el edificio que acogió la sede betanceira das Irmandades da Fala, coincidiendo con la celebración del centenario de la fundación de la Irmandade de Betanzos, unido a una programación cultural para “poñer en valor o noso idioma e a loita pola igualdades das mulleres que fixo a Irmandade”.
La moción recibió el voto favorable de todos los grupos, señalando María Barral, concejala de Cultura, Servizos Sociais, Muller, Educacón e Normalización Lingüística, que por parte del ejecutivo “xa estaba todo previsto” y que consideraban que la fecha más apropiada consideraban que era en octubre de 2017.
La iniciativa sufrió un pequeño encontronazo entre los portavoces del BNG, Betanzos en Común y Betanzos Novo a raíz de una frase del nacionalista Henrique del Río, quien arrogó al BNG ser “o lexítimo continuador e herdeiro do movemento das Irmandades da Fala”, lo que llevó al concejal Xosé Francisco Vales, de Betanzos en Común, a manifestar que “hai outros partidos lexítimos herdeiros, non só o BNG” y a Alberte Muiño, portavoz de Betanzos en Común, a reivindicar haber sido ellos los primeros en presentar esa misma iniciativa ya que su partido lo había hecho en el 2016. El rifirrafe se saldó con un irónico “nosotros no entramos en la pelea de quién es más nacionalista” del concejal del Partido Popular, Pablo Tomé.
Será el número veintidós de los soportales de la plaza del Campo el edificio que acogió las actividades de Irmandades da Fala en la ciudad de Betanzos, el lugar previsto para colocar la placa antes de que termine el centenario.
Local social para los vecinos de A Magdalena, música en los colegios y apoyo al sector del vino
Otras tres mociones recibieron el apoyo unánime de la corporación. En concreto la del BNG relativa a solicitar de la Xunta apoyo al sector del vino y ayudas para los productores tras los daños producidos por las heladas en un tercio de la producción incluida en la denominación de origen protegida Terra de Betanzos, la concerniente a la celebración del día de la música en los colegios de Betanzos presentada por Betanzos en Común y la solicitud de un nuevo local social para la Asociación de Vecinos de A Magdalena planteada por el Partido Popular.
La propuesta de los populares para dotar de un nuevo local al colectivo vecinal del barrio de A Magdalena que Tomé planteó para “cubrir las necesidades de un barrio” y como “una aportación de mi partido a los presupuestos…si es que alguna vez los tenemos, porque nada se sabe”, recibió la crítica de Betanzos en Común quien a pesar de estar de acuerdo con el fondo de la moción, no dejó de señalar que “as formas non son as máis axeitadas”, algo con lo que coincidió el propio alcalde, Ramón García, quien por su parte reprochó al Partido Popular partes del texto de la moción por considerar innecesario las alusiones contenidas referentes a actuaciones sucedidas durante el mandato popular en Betanzos o las que indicaban la escasa colaboración del ejecutivo socialista con los colectivos vecinales.
Finalmente, también salieron adelante las proposiciones de Betanzos Novo sobre la prohibición del uso del glifosato y sobre vertidos contaminantes, mientras que fue rechazada la del Partido Popular sobre la puesta en funcionamiento del plan de accesibilidad de transporte interurbano al centro urbano de A Coruña, argumentando la inconveniencia de presionar por parte del ayuntamiento a otra administración municipal y vertiendo críticas al trabajo del PP en la Xunta A pesar de oponerse, todos dijeron estar a favor de la penetración de los autobuses hasta el centro de la ciudad de A Coruña.