En España se viene trabajando por frenar la cibercriminalidad desde que su tasa comenzó a subir a un ritmo tremendo y continuado desde el año 2011 en adelante. El pasado 2024, este crecimiento se frenó por primera vez y el primer trimestre de 2025 parece mantener la tendencia, con una reducción de 1,2 % de delitos en línea y 3,5% en ciberestafas.
Para llegar a ello, se han aplicado medidas como la formación de los miembros de los cuerpos de seguridad, la promoción de la cultura de prevención y la creación de un marco legal que garantice la fiabilidad de los sitios web. Estas medidas están sirviendo de faro para otras regiones que buscan construir confianza y seguridad en el uso de plataformas como los casinos online en Chile y otros sitios dentro de Latinoamérica, por ejemplo.
Sin embargo, en Galicia todavía no se ha logrado tanta firmeza en esta área, y aunque los delitos convencionales bajaron y la comunidad está entre las más seguras de España, los ciberdelitos aumentaron notablemente.
Repasemos la actualidad de Galicia en esta materia, según el Balance de Criminalidad publicado este miércoles por el Ministerio del Interior.
Bajan los delitos convencionales
El informe publicado realiza un balance de lo acontecido entre los meses de enero y marzo, el primer trimestre del año. De ese período, lo más positivo para Galicia es que los delitos convencionales bajaron en un 3,3%, con respecto al mismo período del año pasado, registrando un total de 16.783 delitos.
Los delitos que más descendieron fueron los homicidios y asesinatos que tuvieron una baja de 80%, las agresiones sexuales disminuyeron un 23,6% (de 55 a 42) y los robos con fuerza en domicilios bajaron un 9,1%, al pasar de 649 a 590.
La comunidad ostenta una tasa de criminalidad de 35,3 delitos por cada 1.000 habitantes, el mismo promedio que registró en el trimestre anterior, pero lo destacable es que son casi 15 puntos por debajo de la tasa de criminalidad registrada en el conjunto de España.
Estas cifras ponen a la comunidad gallega como la tercera comunidad autónoma más segura de España, un logro que no es para nada poca cosa.
Sin embargo, otros factores como las infracciones penales en general subieron un 1%, las lesiones y las riñas tumultuarias crecieron un 6,6% y la ciberdelincuencia subió en un 14%.
Suben los ciberdelitos
El gran talón de Aquiles de Galicia en materia de seguridad actualmente, según este reporte del Ministerio del Interior, es la cibercriminalidad. Su aumento del 14% hace que cerca del 30% de los delitos totales que se cometieron en Galicia de enero a marzo, entren en el ramo de la cibercriminalidad, lo cual es un porcentaje sumamente alto.
Dentro de los distintos tipos de ciberdelitos, los que más aumentaron fueron las estafas informáticas (que son el delito principal en el mundo digital, siendo 9 de cada 10 ciberdelitos).
En total, hubo un 16,3% más de estafas que en el mismo período del año pasado, cuando se cometieron 4.886 estafas informáticas. En este primer trimestre del 2025, fueron 5.680 las estafas cometidas, una cifra preocupante y que llama a tomar medidas en el asunto.
Panorama nacional
Al comparar los números de Galicia con los nacionales, como adelantamos, la diferencia más importante es que en el conjunto de España la cibercriminalidad bajó (1,2 % en general y 3,5% en estafas informáticas), mientras que en Galicia subió.
Parece un porcentaje insignificante, pero la magnitud de este logro radica en que este tipo de crímenes venía subiendo desde 2011, con un aumento impresionante de 488,3% entre 2016 y 2024.
Este descenso de la cibercriminalidad, que se comienza a lograr en España y sus comunidades, resuena en países de Latinoamérica como Chile o Argentina, con ecosistemas digitales en plena expansión pero con un contexto legal estancado o en vías de desarrollo. La experiencia de Galicia y España es vista como una advertencia y un modelo de respuesta para fortalecer la seguridad digital de estos países.
Ahora bien, más allá del crimen en el mundo virtual, si nos vamos al crimen convencional, este tuvo una baja en toda España y ahí sí que coincide la tendencia positiva con Galicia.
La caída en este primer trimestre fue de 3,2%, llegando a una tasa de 40,6 delitos por cada mil habitantes, una de las tasas más bajas de la historia de España y una de las menores en el mundo actual.