Muchos hablan del verano como la “estación del sexo”. Desde hace décadas podemos leer en las revistas de moda y/o estilos de vida cómo el calor favorece al aumento del deseo, a esas aventuras que nos quedarán para el recuerdo. Sin embargo, con el paso de los años, nos hemos preguntado si esto es más un mito o una realidad.
Con muchas comprobaciones a lo largo de este tiempo, se sabe que durante estos meses estamos más disponibles, receptivos y, de alguna forma, con ganas de hacer cosas con la persona que nos gusta, con aquel o aquella con el que siempre solemos pasarlo bastante bien pero, ¿qué hay de cierto en esto?
¿Cuáles son las razones por la que aumenta nuestra líbido en verano?
Para algunos, muchas son las razones por las que el verano viene unido a un aumento de las ganas de intercambiar momentos íntimos con la otra persona. Si en primavera “la sangre altera”, se ve que con el calor nos ponemos más fogosos, tenemos más ganas de calle y también de estar con nuestros amantes.
Esto, que puede deberse a muchas cosas adicionales, está directamente relacionado con el aumento de tiempo libre, la disponibilidad que tenemos para viajar o el hecho de que nos vamos de vacaciones. Alejados de la rutina diaria, el deseo parece que se hace más grande, mucho más efectivo pero, ¿qué otras cosas influyen? A continuación, te dejamos con algunas de las más populares:
Aumento de las horas de luz
Sí. Aunque para intimar pensemos en esa tarde fría en la que llueve y hay tormentas mientras nosotros estamos en la cama, lo cierto es que durante las de verano tenemos más ganas de conectar con el otro. Las horas de luz que se agregan al día hacen que estemos más receptivos, con ganas de disfrutar de todo lo que está por venir. ¿Te animas a comprobarlo tú mismo?
Tiempo de vacaciones
Estar de vacaciones ayuda bastante a lo que es la líbido y el aumento del deseo sexual hacia la otra persona. Por lo general, durante el verano contamos con más días libres y sentimos que disponemos de una mayor franja horaria para disfrutar de estar en pareja y/o con los amigos en general. ¡Aprovecha todas las ocasiones que se os presenten!
Salir de fiesta
En verano salimos más de fiesta. Solo necesitamos el chiringuito o la discoteca a pie de playa para que hagamos de las noches grandes madrugadas. La noche, joven como ninguna, nos habla de esas quedadas en las que podemos disfrutar de una persona especial, de lo bien que vamos a estar haciendo uso del tiempo tal y como nos gusta. ¿Te animas a hacer algo distinto hoy?
Ausencia de ropa
Ir más ligeros de ropa también puede ser indicativo del aumento de nuestras ganas con los encuentros íntimos. Lejos de que se pueda leer mal, son varios los estudios que aseguran el estímulo de las fantasías o de pensar en esas cosas que nos gustaría hacer con nuestra pareja cuando la vemos en bañador o pijama de verano.
Juguetes eróticos para el aumento de la líbido, algo que siempre funciona
Puede que el verano sea una estación en la que tenemos más ganas de practicar sexo, de disfrutar al máximo con la otra persona y, en base a esto, también compensa la idea de que pensemos en nuevas posturas, de que no dejemos nada pendiente cuando se habla de todo lo que nos encantaría hacer con los amantes.
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El uso de artículos que ayudan con el deseo y/o la imaginación sexual, siempre sirve como un pequeño refuerzo para esas personas que sin quererlo caen en la rutina y, en el momento de cambiar, no saben muy bien hacia dónde tirar. Con alternativas apasionantes, si eres de los que ha estado mirando catálogos para sorprender a la pareja que tiene, igual deberías pasarte por aquí.
A la líbido no hay que ignorarla pero las relaciones íntimas se deben cultivar en cualquier fecha del año. Son muchas las parejas que comienzan a fallar por la falta de deseo y es por esto que debemos hacer todo lo posible por acercarnos al otro, para que comprenda que todavía quedan muchas cosas por hacer, aspectos de los que disfrutar al máximo incluso cuando lo creíamos imposible.
¡Ya lo sabes! Si en estos días te sientes mucho más atraído por los momentos íntimos que de costumbre, puede que esté influyendo sobre ti el tiempo que viene, el que motiva a las largas noches de verano y al disfrute en pareja. ¿Te vas a quedar sin probar algo que todo el mundo hace desde años atrás?