Vacas muertas, esqueletos entre el abono, y otras reses desnutridas y con heridas convivían en el paraje desolador de una explotación en San Pedro de Viana.
Una imagen aterradora fue la que se encontraron hoy los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil con base en Monforte de Lemos, en su visita a una explotación ganadera de San Pedro de Viana, fruto de una investigación iniciada al tener constancia de una alta mortandad de reses.
Se encontraron con un auténtico vertedero de cadáveres, con cuarenta vacas de raza frisona muertas en distinto estado de descomposición. Algunas enterradas en una cuadra anexa aunque también había restos óseos entre el abono. Además había una veintena con vida pero desnutridas o heridas. Se procedió a inmovilizar la explotación ganadera que se dedicaba a la venta de leche y que estaban en nefastas condiciones de higiene. Otra de las características era que el silo vegetal estaba vacío y no se observaba otro tipo de alimentación para las vacas famélicas que sobrevivían a estas extrañas circunstancias.
Las autoridades investigan al titular de esta explotación de San Pedro de Viana por un presunto delito de maltrato animal. En la granja había 63 ejemplares censados.
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