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martes, marzo 26, 2024

Ponte do Porto, crónica de tiempos perdidos II

En Adiante Galicia, segundo capítulo del serial sobre Ponte do Porto, del escritor Rafael Lema Mouzo.

Enlace al primer capítulo  aquí

En la Edad Moderna se construyen las capillas de San Roque y Guadalupe, San Bartolo de Arou y Espíritu Santo de Camelle. La primera referencia apunta al siglo XVI. Y nacen las cofradías religiosas que tendrán una importante labor en la vida social local. Pese a la pérdida material de la arquitectura de la época con la demolición de nuestros templos, si contamos con una rica imaginería religiosa. Magníficos retablos y esculturas barrocas, o orfebrería de grandes artistas. Ferreiro, Blas Espín, Gregorio de Lema, Vaamonde, Mayán, Noya, Juan el Mayor. 

 

Y una artesanía que llegó a nuestros días y tuvo en Ponte do Porto el epicentro de su venta y distribución, el encaje de Camariñas. La feria de Ponte do Porto fue durante más de un siglo, en la época de oro del encaje, el gran punto de compra y venta de encaje de la ría y de Galicia. Las más importantes familias de puntilleiras exportadoras tenían su base en nuestro pueblo, en donde asimismo hubo siempre una nutrida cantidad de mujeres panilleiras en las desaparecidas panilladas. Nuestros comerciantes introdujeron en el encaje gallego nuevos modelos en el siglo pasado y confeccionaron los primeros almanaques comerciales. Tenían asimismo en Estados Unidos, Cuba, Argentina, Uruguay, México, delegaciones comerciales a cargo de parientes o socios, activos en gran escala desde 1880 hasta 1960. La lista de oro de grandes puntilleiras y puntilleiros porteños da una idea de esta pujanza: Noya, Miñones, Carril, Rodríguez, Mazaeda, Lastres, Pazos, Suárez, Carballo, Romero.

 

Desde el siglo XVIII hay referencias al encaje porteño. En 1852 los principales encajeros son Pedro Carballo y Francisco Couto, abad de Toba, residente en Ponte do Porto. La principal fortaleza del pueblo, además de la colonia de comerciantes, era estar en el centro de la principal zona de producción: Carnés, Cereixo, Carantoña, Leis. En 1910 Concepción Rodríguez entrega una importante venta a la iglesia parroquial y suministra a Balboa de Muxía. Una de sus cajas la llevará el Titanic en su trágico viaje. Destacadas puntilleiras del siglo pasado son Lela Mazaeda, Josefa y Elisa Pazos, Trinidad y Adelina Figueiras, Pastora de Jimena, Fina de Lela, Oliva y Clarisa Noya, Lola do Caion, Lola de Moncho y hermanas (Carmen, Luisa da Lota), Fina do Tuiño.

 

 

En 1607 poseemos una descripción de nuestra parroquia en las Memorias de Jerónimo del Hoyo. Ya éramos jurisdicción del conde de Altamira. La feligresía tiene 29 casas, o sea unos 120 vecinos. La iglesia está bajo el patrocinio de San Martiño Pinario, con trece ferrados de trigo y siete piezas de ganado, y de Sancho López de Leis. Se citan las capillas de San Roque y Espíritu Santo de Camelle. Y se dice que la de San Bartolo de Arou pertenece a San Martiño Pinario, con diezmos de Fernando de Leis. El rector Lope Vázquez donó su casa, molino y huerta con naranjos el 15 de abril de 1597. Es pues nuestro primer benefactor conocido. La casa es la rectoral que todos recordamos, en el lugar de Riazos, también derribada, no hace tanto. Los hidalgos de las casas de Leis y Carantoña se enterraban en la parroquial de A Grixa y eran asimismo fomentadores y patronos de oficios, fiestas, cofradías.

 

En 1622 el cartógrafo Pedro Teixeira realiza el primer grabado de nuestra parroquia. Dibuja nuestra ria y rio, el puente de cuatro arcos, la iglesia parroquial y dos grupos de casas, en A Grixa y Outeiro, con sus colinas. Dos barcos fondeados en Dor y A Gándara.La documentación parroquial desde 1565 hasta 1850 nos aporta numerosos datos de interés. Cita los lugares actuales de la parroquia junto a otros ya desaparecidos (Rodeiro, Vilarellos, Casas Novas, Casa de la Ribera) y listas de vecinos. El documento Renta del Tabaco de la Casa de Altamira de 1752 nos incluye integramente en el estado del conde de Altamira y en el partido de Vimianzo. En esta época son del conde las ferrerías de As Barrosas, a donde llega hierro procedente de San Sebastián en dos pataches de Camariñas, y los curros de caballos bravos de Camelle. Aparecen los lugares de: «Puente del Puerto, La Iglesia, Garás, Oallo, Dor, Outeiro, Barrosas, Curros, Casas Nuevas, Vao del Puerto, Rodeiro, Camelle de Arriba, Camelle de Abajo, Arou y Lazo».

 

Tenemos nuestro propio alcalde popular, elegido por los vecinos, y otro de señorío. El centro administrativo de estos cargos estaría en Dor, en la casa da Cerca (actual pazo da Paxariña). Y en la casa do Reino, en O Outeiro. Otro punto en donde hubo alcaldía fue la desaparecida casa Romero de Porto. De hecho la parroquia toma su nombre de este lugar, casa solar de los Romero de Moscoso, emparentados con los Leis y Carantoña. Las reuniones para censos y catastros se hacían en la casa rectoral de Riazos, como el Catastro de Ensenada de 1 de junio de 1753. Era la cabecera de las llamadas 9 poblaciones que incluían: Ponte do Porto, Buría, Traba, Xaviña, Serantes, Cereixo, Carnés, Puebla del coto de Cereixo, coto de Carnés. En este año Ponte do Porto tiene 134 vecinos (casas). 25 ruedas de molino, dos clérigos. Bernardo Romero tiene dos tabernas. Son soldados del Regimiento de Milicias Provinciales de Santiago, Martín do Mouzo y Juan de Grille. Los diezmos los lleva el cura y don Bernardino Rioboo, clérigo de Cabanas. En las siguientes crónicas apuntaremos algunos datos mas de interés tras este relatorio general. Un foro de 1757 del conde de Maceda y Taboada, señor de las torres de Cereixo, don  Francisco Javier de Lanzós y Yánez de Novoa, a favor del cura de Cereixo Gerónimo Míguez por la Casa de la Ribera (actual de Julián Tedín), cita la taberna de Mateo López en el agra de A Gándara.

 

El Libro de Bautizados de San Pedro do Porto y San Cristóbal de Carnés de 1560-1615 nos aporta los primeros vecinos fundadores de ambas parroquias. También algunos personajes principales y oficios. Por ejemplo los hidalgos Diego Sanjurjo de Montenegro de Carantoña, Francisco Enríques de Novoa (sargento mayor), doña Elvira de Lobera, Gregorio de Lema de Sabadelle y su mujer doña María Becerra de Cances, Francisco de Leis de Cereixo, doña María de Borrazas. Los curas Lope Vázquez de Eras Fontán, Gregorio Vázquez y Joam de Sotomayor. Los bachilleres Álvaro López y Manuel Domínguez. Los canteros Narciso de Pérez y Xil Montoto. Los tenderos Gregorio de Moreira y Aldonza de Mona Sanz. Los sastres Joaquim Díaz, Francisco González. Los zapateros Gregorio González, Francisco Monroy. El herrero Francisco de Vilar. El labrador rico Joam Graiño de Campolongo.

 

Los primeros vecinos son: Francisco de Calzas, Francisco Graiño el Grifo, Francisco do Allo, Alfonso Moreira, Xil do Roxo, Catalina de Paes, Francisco de Paes, Ynes Bello, Gregorio Carril, Xil Carballo, Maria Miñones, Diego de Canosa, Francisco Suárez, Francisco de Sanz, Antonia Carballo, Gregorio de Lema, Gregorio San Jurjo, Maria Abeleira, Gregorio de Rego, Alberte Suárez, Francisco Bello, Fernando de Castrexe, Francisco Ferreiro, Ynes Dias, Vicente Álvarez, Brais do Mouzo, Francisco da Lagoa, Gonzalo do Mouzo, Francisco Mouzo y Maria Myñones, Francisco de Leis y Maria Taxes, Manuel do Mouzo, Simón da Toxa.

 

@AdianteGalicia

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